Redacción Q’hubo – qhuboibague@gmail.com
La tormenta eléctrica que cayó el domingo sobre La Musical causó más de 50 emergencias en la ciudad, informó el secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo, César Gutiérrez. La más grave fue el caso del hombre que recibió una descarga eléctrica por un rayo en la Ciudadela Simón Bolívar y las inundaciones por el colapso de la red de alcantarillado.
El Ibal, Bomberos, Defensa Civil y Cruz Roja, no dieron a basto. En caso de una tormenta eléctrica, las autoridades recomiendan no salir de la casa si no es necesario, cerrar puertas y ventanas, y mantener a la mano la línea 119 para reportar cualquier situación. Aún falta por lo menos un mes de intensas lluvias. Q’HUBO recorrió algunos de los sectores afectados.
En Ancón
A Héctor Toro, zapatero de profesión, el agua lo cogió trabajando en su local. “Yo estaba encerrado. Los vecinos dicen que me golpearon la puerta muchas veces pero por el sonido de la lluvia, no escuchaba. Cuando me di cuenta todo estaba inundado. Se me dañó el equipo de sonido, moldes, plantillas y muchos materiales. Nunca nos habíamos inundado así”, dijo.
Rubí Guayara, residente del sector, fue otra de las afectadas. “Sinceramente pensé que me había llegado la hora. Cuando empezó a llover me encerré y al rato, cuando vi que estaba entrando mucha agua por debajo de la puerta abrí y en segundos el apartamento se inundó. El agua me llegaba hasta más arriba de la cintura. Perdí el televisor, la nevera, la cama, el colchón y el celular se me mojó. Pensé que iba a morir ahogada”, relató.
Las Ferias
Julio Ernesto Sánchez vive en la calle 26 número 1A – 51 Sur del barrio Las Ferias, donde más de 10 viviendas se inundaron. Según el ciudadano, lleva muchos meses gestionando ante el Ibal la reparación de las redes de alcantarillado. “La red de acá colapsó hace mucho tiempo. En algunas viviendas las aguas negras se devuelven por los sifones y cuando llueve es terrible. Precisamente la semana pasada estuve en el Ibal; me dijeron que esta semana venían. Vamos a ver qué pasa porque ya no soportamos vivir así”, indicó.
El domingo, a pesar de que no es recomendable salir en medio de una tormenta eléctrica, a los habitantes de este sector de la ciudad no les quedó de otra sino con balde en mano, sacar agua de sus casa.