Una fuga de aguas negras que salía desde una alcantarilla y que era el dolor de cabeza de los habitantes de las manzanas R y RR del barrio Arkalá, por fin fue priorizada por la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado, Ibal.
La entidad anunció que desde el miércoles se realiza la intervención en el daño de alcantarillado que generaba malos olores, era criadero de zancudos y un problema de salubridad para la comunidad.
El Ibal señaló que realizan la reposición de tubería del alcantarillado con el fin de mejorar la prestación del servicio de los habitantes del sector.