IBAGUÉ. Los dos primeros días del juicio fueron empleados para escuchar la ampliación de indagatoria de los acusados. Varios de los militares se acogieron al derecho a guardar silencio y la mayoría negó que hubieran manipulado la escena y no hubiera habido enfrentamiento.
En la audiencia inicial se conoció que Tomás Eduardo Osorio Villa, alias ‘El Oso’, fue la persona que informó sobre el paso del vehículo en que se transportaban los cinco comerciantes asesinados, de quienes dijo iban a cometer un asalto a un bus sobre la vía a El Totumo, entre el 18 y 20 de diciembre de 2008.
El mayor José Wilson Camargo Árevalo, supuesto determinador del hecho, manifestó en su declaración que ‘El Oso’ era un traficante de información y una fuente poco confiable, pero admitió que los datos que entregó llevaron finalmente a realizar el operativo en que resultaron muertos Yéison Méndez Zorro, Alexander Jaramillo Quitora, Rubén Fernando Sánchez Morales, Dorancé Enciso Medina y Armel Ramírez Lozano.
El oficial del Ejército reconoció que después de haber sido asegurado le envió dos correos electrónicos a Osorio pidiéndole que no se fuera a dejar coger y que en el momento de tener que rendir una declaración la hiciera coincidir con la suya para hacerla creíble, incluso le dio indicaciones de cómo debía relatar los hechos y le dijo que a cambio contaría con él de por vida.
El mayor Camargo expresó que lo hizo por temor a resultar involucrado y ser condenado como otros militares que conoce; señaló que ‘El Oso’ lo ayudó en principio, pero luego lo amenazó con cambiar su declaración, debido a que no le quiso seguir entregando dinero, pues durante varios meses le estuvo sonsacando plata a cambio de informaciones que nunca se hicieron efectivas.
Quedó en entredicho, por qué si se conocía de la falta de resultados por parte de ‘El Oso’, su información fue dada como posiblemente verdadera.