REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
La fuerte temporada de lluvias provocó estragos en Santa Isabel. Una sección de la vía que conduce del casco urbano a una vereda fue arrasada en su totalidad por un derrumbe y a otras vías del municipio les podría suceder lo mismo, de continuar el mal clima. Por otro lado, varias familias que sufrieron afectaciones requieren reubicación.
Los estragos de la lluvia
El alcalde de Santa Isabel, Rodolfo López Sierra, informó con preocupación la grave emergencia que vive el municipio del Norte por cuenta de los aguaceros constantes. Una de las afectaciones más graves se registró en la vía Guaimaral- Humareda, donde unos 20 metros de vía dejaron de existir cuando el terreno cedió.
Los habitantes de veredas como La Esmeralda, Brasil, La Humareda y la zona del cañón del río Totare, que incluye los sectores Quebrada Negra y San Francisco, pertenecientes a Anzoátegui, quedaron incomunicados y sin posibilidad de transitar por este carreteable con sus productos.
El boquete que dejó el derrumbe es tan grande y profundo, que el primer mandatario de los santaisabelitas pidió a la comunidad no transitar por la parte baja del sector, pues además se han presentado represamientos de agua.
En un comunicado emitido por la Alcaldía de Santa Isabel se hizo un llamado a la Gobernación del Tolima, a la Oficina de Gestión del Riesgo y al Gobierno Nacional para atender esta emergencia, brindando ayuda al municipio, pues el impacto económico es grande y la comunidad requiere apoyo inmediato.
Según indicó López Sierra, el Gobierno departamental ha brindado ayudas y algunos de los damnificados ya tienen refugio, pero el municipio no cuenta con herramientas para remoción de material de derrumbe y el presupuesto entregado se ha ocupado en mangueras para suministro de agua.
Afectaciones graves
- Daños en cuatro bancas de carreteras.
- 16 alcantarillas colapsadas.
- Vía Santa Isabel – Venadillo con daños y derrumbes en varios tramos.
- Dos acueductos destruidos.
- 30 familias requieren reubicación.
- Pérdidas en cultivos de arveja, fríjol, papa, café, plátano y tomate de árbol.
