IBAGUÉ. En la última ‘trasnocha’, como llaman los conductores de buseta al último recorrido del día, José Arnulfo Ruiz Fajardo fue víctima de la delincuencia junto a su esposa, hijo y cinco pasajeros.
A eso de las 9:00 de la noche recogió a Mónica Alexandra Velásquez, compañera sentimental, y a su hijo de 18 meses de nacido, y siguió trabajando con la ruta 9.
Luego de 15 minutos pasó por la vía entre Musicalia y el Jardín Comuneros, cuando observó a dos sujetos sospechosos.
“Él giró en la parte oscura y los tipos le hicieron el ‘pare’, pero estaban dudosos. Cuando él fue a arrancar ellos se subieron rápido y dijeron que era un atraco”, afirmó Velásquez.
Uno de ellos llevaba un arma de fuego y el otro un cuchillo, pero ‘Castalia’, como es conocido el motorista, pensó que era un arma de juguete.
Debido a que no quiso frenar la buseta, el sujeto disparó en dos ocasiones. Una de las balas impactó en el muslo derecho del conductor.
“El delincuente se tiró de la buseta y el otro se subió por encima de la registradora con el cuchillo. Al verlo, dejé al niño en el rincón”, agregó.
El hombre intentó lastimarlos pero Velásquez lo empujó y se le cayó la gorra, que fue revisada por la Policía.
Finalmente, los maleantes se llevaron cerca de 300 mil pesos del producido, y el bolso de una de las pasajeras.
‘Castalia’, ya casi pálido y pensando en su pequeño, decidió seguir conduciendo hasta la casa que se encontraba cerca al lugar, en el barrio Palermo.
