IBAGUÉ. A finales de julio de 2008 comenzó la etapa de juicio de uno de los casos de violación más sonados en los últimos años en la capital tolimense, en la que un joven que para entonces tenía 19 años de edad, fue acusado de acceder violentamente a un menor de edad en la vereda Carmen de Bulira de la capital tolimense.
La historia volvió a dar de qué hablar esta semana cuando se supo que Rubén Darío Ruíz Devia había fallecido bajo extrañas circunstancias en la Cárcel de Picaleña.
Aunque habrá que esperar el informe de la necropsia para conocer la causa real de la muerte de Ruíz Devia, ocurrida el lunes pasado dentro del complejo penitenciario, una de las hipótesis que se planteó tendría que ver con una supuesta intoxicación con alucinógenos.
Astrid Quintana, personera delegada del Ministerio Público, Derechos Humanos, Infancia y Adolescencia, manifestó que de acuerdo con la información suministrada por el Centro Penitenciario, “según parece, él tuvo visita el lunes y después de eso empezó a sentirse mal. Lo llevaron al Hospital y murió en el transcurso”, refirió.
“Cuentan, aunque tampoco hay mucha certeza, que parece que se comió unos ‘dedos’ con cocaína. Son unos bulticos (sic) diminutos que hacen para ingresarla y ellos, para esconderlos, se los comen. Como los requisan antes de ingresar al pabellón, de pronto se los comió. La necropsia aún no ha salido, son los comentarios que hay”, dijo la funcionaria.
Sobre las muertes recientes dentro de la Cárcel, Quintana puntualizó que la mayoría de ellas ha sido por causas naturales como “fallas de corazón, Sida u otra enfermedad, no porque los hayan matado. Es una población de unas cuatro mil personas, es normal que en un mes se muera uno o dos”, concluyó.
Los hechos
A principios de septiembre de 2007, Rubén Darío Ruíz Devia fue capturado por el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI tras una denuncia en su contra en la que un menor que tenía 10 años para la fecha de los hechos, manifestó que el 30 de agosto había sido víctima de un ataque sexual por parte de Ruíz Devia, de 18 años para ese entonces.
El 24 de julio de 2008 comenzó la etapa de juicio contra el procesado, ya con 19 años, acusado por acceso carnal violento y secuestro. El menor de edad dio su testimonio en privado, acompañado por la mamá, ante el Juez Primero Penal del Circuito.
Según el relato del menor, Rubén Darío Ruíz Devia lo raptó y secuestró por varias horas amarrado a una cama en la que supuestamente lo golpeó y accedió carnalmente. La familia del acusado manifestó que todo era una invención de madre e hijo y que contaba con pruebas para desvirtuar el testimonio, una de ellas era que había pasado todo el día con su esposa para la fecha de los hechos.
A principios de agosto, durante la lectura del sentido de fallo, el procesado huyó del Palacio de Justicia antes de que el despacho judicial resolviera declararlo culpable.
En cifras: 26 años de cárcel, condena que purgaba el procesado.