Luego de seis semanas de arduo trabajo, culminó el rodaje de la película La Jauría, una producción ibaguereña, escrita y dirigida por el realizador Andrés Ramírez Pulido. La mayor parte de las grabaciones se llevaron a cabo en zona rural de Ibagué, y tuvo locaciones en Coello, Chicoral y Valle de San Juan. Ramírez habló con Q’Hubo sobre la experiencia de rodar su primer largometraje y las expectativas sobre su estreno.
Expectativas superadas
Durante muchos meses, el equipo de producción de La Jauría, el segundo largometraje desarrollado y realizado en Ibagué, se dio a la tarea de conseguir locaciones y actores no profesionales para dar vida a los personajes de la cinta. “Tenía unos perfiles en mi cabeza muy definidos para los personajes principales. Sabíamos en qué sitios los podíamos encontrar. En total vimos cerca de dos mil ‘pelaos’ y luego empezamos a hacer un filtro, hasta quedar con los principales, que superaron nuestras expectativas”, indicó Ramírez.
El director aseguró que las experiencias de vida de los seleccionados enriquecieron la puesta en escena, y que estos jóvenes tenían un aura especial. Además, explicó que dirigir a actores no profesionales implica tener mucha paciencia y estar abierto a lo que las personas pueden proponer a partir de sus personalidades y experiencias. “La película respira esa naturaleza que hay en las calles”, expresó.
Una dura historia
La Jauría cuenta la historia de un adolescente que desea asesinar a su propio padre, pero termina matando a otro hombre, por error. Como consecuencia de ello, purga una sentencia un poco extraña y enigmática. Durante su estadía en prisión, se suscita un cambio en el personaje, quien deberá afrontar sus problemas familiares y el odio que siente hacia su progenitor.
Ramírez aseguró que se interesa mucho por retratar conflictos del ser humano, relacionados con contextos a los que no ha sido ajeno. De ahí parte su inquietud por contar historias. En este caso, sobre cómo la relación paterna puede marcar a un ser humano, en etapa adolescente. Este último tema, recuerda a su galardonado cortometraje El Edén, estrenado en 2016.
Muy agradecido
El rodaje contó con un equipo de más de 70 personas, entre personal local, nacional y de Francia. Ramírez manifestó que se trató de una tarea ardua, pero satisfactoria. El montaje iniciará este mes, y finalizará en febrero de 2022, con trabajos de posproducción hasta mayo. Luego se iniciará la búsqueda de festivales en el exterior, para un posible estreno en Colombia a finales del próximo año.
Del equipo de realización, el director, quien creó la productora Valiente Gracia, destacó el trabajo de Johana Agudelo, diseñadora de producción; Sergio Hernández, scouter, asistente de casting y de producción; María Alejandra Rodríguez, coordinadora de producción y Balthazar Lab, director de fotografía francés.
La cinta está protagonizada por Johan Stiven Arboleda y Maicol Jimenez, los chicos escogidos. Ramírez aprovechó para agradecer a todas las personas que participaron en el casting. “Los chicos hicieron un muy buen trabajo. A los que quedaron, mil gracias. Y a los que no, gracias por las pruebas que hicieron. Fue muy difícil escoger. Hay mucho talento y ‘pelaos’ muy pilos en las calles”, expresó el realizador.
Hay que apoyar
Sobre el panorama del cine local y regional, Ramirez afirmó que la realización audiovisual está creciendo, principalmente por comunicadores con énfasis audiovisual, aunque reconoce que pocas personas están haciendo cine. Sin embargo, considera que es necesario apoyar proyectos pequeños de estudiantes y jóvenes, que son la semilla para a largo plazo descubrir a los futuros directores de cine ibaguereños.
Amplia trayectoria
Andrés Ramírez Pulido es un director de 32 años de edad, nacido en Bogotá, cuya carrera se ha desarrollado en Ibagué. En 2007 dirigió el cortometraje ‘Ella’, en 2013 ‘Mirar hacia el sol’, en 2016 estrenó su multipremiado corto ‘El Edén’, y en 2017, su cuarto cortometraje ‘Damiana’, fue selección oficial en el festival de Cine de Cannes, donde aspiró a la Palma de Oro. La Jauría, su ópera prima, fue ganadora de estímulos del FDC para desarrollo de largometraje en 2019.