Dada la contingencia desatada por el Covid-19, Fecode rechazó la posibilidad de volver a las aulas, debido al elevado riesgo que se desataría para maestros y estudiantes. El gremio de maestros se declaró en desobediencia civil, ante la propuesta del ministerio de Educación de alternar clases virtuales y presenciales en todo el país.
Según lo afirmó Nelson Alarcón, presidente de la Federación, 155 docentes han fallecido por este virus y hay 2.544 casos confirmados entre profesores y familiares.
«En cumplimiento de las orientaciones del Plenario Nacional de Presidentes y como respuesta a la postura caprichosa, obcecada e irresponsable del Gobierno Nacional, el magisterio no asistió a las Instituciones Educativas, donde había convocado a la presencialidad, ejerciendo la desobediencia civil como un acto de dignidad en defensa de la vida y la salud de las comunidades», expresó la agremiación de docentes.
Por esta razón, fue suspendido el trabajo académico en todo el país, y se adelantarán labores de sensibilización durante todo el día sobre la inconveniencia de la presencialidad mediante la alternancia, así como los posibles riesgos y afectaciones para la comunidad educativa.
La organización realizará encuentros en vivo, mediante asambleas con estudiantes y padres de familia, así como una solicitud de verificación de las condiciones actuales y reales de las plantas físicas de las instituciones educativas a nivel nacional.
Además, el gremio pidió adelantar acciones de control político a las administraciones locales que obligan a cumplir la alternancia educativa.
«Continuaremos trabajando desde casa garantizando el derecho a la educación de los niños, niñas y jóvenes, exigiendo al Gobierno las garantías necesarias para tal efecto. Manifestamos nuestra decisión de diálogo y si el miisterio de Educación continúa imponiendo sus medidas de corte dictatorial, adelantamos diferentes acciones de movilización y el Paro Nacional del Magisterio», advirtió Fecode.