REDACCIÓN Q’HUBO – qhuboibague@gmail.com
Ocho integrantes de una familia que reside en el barrio 20 de Julio parte alta, comuna Dos de Ibagué, tuvieron que desalojar la vivienda que han ocupado durante todas sus vidas a raíz de un deslizamiento que destruyó parte de la casa hace varios meses.
Luego de dicha emergencia, instalaron un plástico de gran tamaño para evitar que las lluvias sigan desestabilizando el terreno, pero este ha seguido cediendo, por lo que solicitan ayuda de la Administración municipal para mitigar dicho riesgo.
La emergencia
El martes 24 de agosto, un deslizamiento de tierra destruyó gran parte de la vivienda de la señora Nubia María Rodríguez, ubicada en la carrera 15 número 10 – 15 del mencionado barrio.
La emergencia empezó a registrarse durante la tarde de aquel día y obligó a doña Nubia y a los otros siete integrantes de su familia a evacuar la casa, pues varios árboles de gran tamaño y decenas de metros cúbicos de tierra amenazaban con caer sobre el techo.
Al anochecer, la amenaza de la naturaleza se cumplió. Tres árboles grandes y gran cantidad de lodo cayeron sobre tres casas y destruyó parcialmente la de doña Nubia. Ese día, el Cuerpo de Bomberos Oficiales de Ibagué, la Defensa Civil y la Secretaría de Ambiente y Gestión del Riesgo, atendieron la emergencia y evacuaron a la familia Rodríguez y dos más, cuyas viviendas también se vieron afectadas.
Temor a un nuevo deslizamiento
Desde ese día comenzó la lucha por recuperar los enseres que quedaron atrapados bajo los escombros y aún servían, al tiempo que empezaron a retirar toneladas de tierra y lodo que destruyeron más del 70% de la casa, único patrimonio con el que cuentan los Rodríguez.
Santiago Cuervo, uno de los residentes del inmueble, manifestó que después del deslizamiento su familia ha tenido que enfrentar una difícil situación.
Algunos tuvieron que irse a vivir a otros lugares pagando arriendo o de posada donde algún familiar y a la fecha no han podido regresar a ocupar el predio que les pertenece porque faltan adecuaciones.
Santiago recuerda que los últimos cuatro meses de 2021, a él y a su familia les tocó trabajar muy duro para lograr evacuar toda la tierra porque no contaron con ayuda de ningún ente gubernamental para realizar dicha labor, salvo un contenedor que Interaseo les instaló frente a su vivienda para que dispusieran de los escombros.
De manera posterior tuvieron que esforzarse para conseguir recursos y así poder reconstruir la cocina, el patio, los baños y cuatro habitaciones más que resultaron completamente destruidas. En dichos trabajos han empleado solo mano de obra familiar y Santiago, cuya edad oscila los 18 años, ha sido fundamental porque dedica casi todos sus ratos libres después del colegio a contribuir con la recuperación de la que ha sido siempre su casa.
Solicitan ayuda
Aunque en un principio a la familia Rodríguez les manifestaron que debía desalojar la casa para ser reubicada y actualmente teme que una nueva temporada de lluvias afloje de nuevo la montaña, sus integrantes se niegan a irse de la única propiedad que poseen y en la cual han visto crecer a varios de sus parientes, pues, aseguran, en esta casa caben los ocho, mientras que si los reubican tendrían que separarse.
Mientras terminan las adecuaciones, solicitan a la Alcaldía de Ibagué, a la Secretaría de Ambiente y Gestión del Riesgo y a Cortolima que les ayuden a mitigar el riesgo de un nuevo deslizamiento construyendo gaviones, instalando un muro de contención o llevando a cabo la intervención que crean pertinente.
