Este miércoles crecieron las diferencias entre el gobierno nacional y la Alcaldía de Bogotá por la expedición de un protocolo para realizar marchas, por lo que ministra del Interior, Alicia Arango negó que se deba pedir permiso para las marchas tal y como lo aseguró la alcaldesa Claudia López.
En tal sentido sostuvo la ministra que “el protocolo no fue sacado del bolsillo, lo construimos con la Alcaldía de Bogotá”. Arango explicó que el mismo se expidió en cumplimiento al fallo de una juez que ordenó sacar un protocolo con el cual se asegurara la vida tanto de las personas que van a marchar como de los demás ciudadanos.
Precisó la ministra que en el documento no se está obligando a las personas que van a marchar a que pidan permiso, lo cual sostuvo que es un derecho y que el mismo no se está vulnerando. Resaltó que sí deben informar a la autoridad local, es decir a la alcaldía respectiva cuándo, por dónde será y cuánto tiempo, durará la marcha para que así las autoridades prevean la forma como se aplicará el protocolo.
Igualmente, la titular de la cartera del Interior se apartó de la afirmación de la alcaldesa López en el sentido del cuerpo élite que deberá crearse para proteger a la manifestación. “El cuerpo élite es algo parecido a los gestores ciudadanos que se tienen en Bogotá, de pronto el nombre no gustó, pero es lo mismo que los gestores que ella tiene”, señaló.
Finalmente, la ministra Arango resaltó la marcha de la minga indígena, “ha sido absolutamente ordenada y es una muestra que se puede hacer una protesta pacífica, la guardia indígena sacó a un grupo infiltrados que ellos no querían que estuvieran marchando”.
