IBAGUÉ. Francisco Castaño, taxista de profesión, fue uno de los pocos de la ‘mancha amarilla’ que se atrevieron a salir ayer a trabajar con el casi inexistente abastecimiento de gas en las estaciones de servicio de la capital tolimense: “Tocó hacer unas filas tremendas para tanquear. Hoy (ayer) pude, pero no sé si más tarde alcance a conseguir gas”, dijo.
“No se pudo laborar así porque el carro no se pudo trabajar a gasolina, y perdí todo el fin de semana”, puntualizó Castaño.
El presidente de la Unión de Taxistas de Ibagué, UTI, Alfredo Medina, indicó que la situación era preocupante ayer: “Esto nos afecta a los del gremio que no tenemos conversión a gasolina. No hay sino un poquito en las estaciones y así es duro. Mañana (hoy) se nos agregan los transportes escolares, que también saldrán perjudicados” dijo Medina.
El vocero de la UTI puntualizó que varios de sus compañeros se fueron de pérdida, ya que quienes pudieron trabajar con el sistema a gasolina, tuvieron que multiplicar gastos, y restar utilidad: “Pasaron de 20 mil pesos de tanqueo a casi 50 mil, y como los que son asalariados tienen que llevarle más plata al dueño del carro, no les queda nada”, concluyó el directivo de la ‘mancha amarilla’.
El miércoles termina la angustia
El gerente de Alcanos de Colombia, Carlos Navarro, precisó que la restricción del servicio de gas vehicular fue a raíz de labores de mantenimiento de uno de los pozos de Ecopetrol que provee a la firma, ubicado cerca a Ortega y que abastece a las regiones de Tolima y Huila.
“No está afectando en ningún momento al sector residencial. Estamos trabajando de manera que no haya un desabastecimiento total en el sector vehicular; se han tenido momentos de interrupción porque las presiones que recibimos no son suficientes para atender la demanda”.
OSCAR BORJA
