IBAGUÉ. Un desacuerdo en el costo del servicio de un domicilio habría ocasionado la discusión entre una familia residente en el barrio Tolima Grande y el conductor de un vehículo particular.
Q’HUBO dialogó con las dos partes involucradas en el bochornoso hecho que generó conmoción en la noche del viernes.
La Familia
El señor Edward Molina, quien esperaba el domicilio, aseguró que la discusión con el presunto conductor de plataforma digital se generó por un presunto cobro excesivo del servicio. Según Edward, el sujeto que lo agredió les cobró 18 mil 200 pesos por llevar los tamales desde el barrio Departamental hasta el sector de Tolima Grande.
“Nosotros le reclamamos porque nos pareció un cobro abusivo, pero cuando fuimos a grabar las placas del automotor, el sujeto reaccionó de forma violenta y por poco me arrolla. En medio de su huída me tumbó y me rapó el celular, el cual al parecer botó metros más adelante” relató el señor Molina.
La persecución
Dos integrantes de la familia Molina luego del incidente, emprendieron la persecución contra el conductor, de quien creían tenía en su poder el dispositivo móvil. El vehículo particular fue ubicado en el sector aledaño a la Calle 61 con Carrera Quinta, donde llegaron unidades policiales y taxistas que habían sido alertados por grupos de WhatsApp de lo sucedido.
Al lugar también arribaron unidades de tránsito, quienes inmovilizaron el vehículo particular que se vio inmerso en el bochornoso hecho.
En el lugar de los hechos la familia Molina se percató de que el hombre había arrojado el celular a unos cuantos metros de donde sucedió el incidente, pero de igual manera denunciaron el presunto comportamiento violento del conductor.
Entregó su versión
Q’HUBO logró contactarse con Hawer Acosta, conductor del vehículo particular, quien manifestó: “Yo fui a llevar el servicio y le dije a la mujer que me iba a recibir el pedido cuanto había marcado la plataforma y el cobro que le iba a hacer, pero al lugar llegó un señor, al parecer en estado de embriaguez e intentó agredirme y yo por eso huí del lugar, pero no me robé ningún celular como dicen, ni arrollé a nadie”.
Acosta, le relató a Q’HUBO que la situación que fue divulgada a través de redes sociales y grupos de WhatsApp ha dañado su imagen y lo ha perjudicado de manera personal, agregó que al momento de ser abordado por los sujetos fue golpeado.
Por otro lado, Acosta manifestó que no trabaja con la plataforma Uber y que además tiene un permiso legal de la EPS Sanitas, con quien según él, tiene una vinculación laboral para transportar personal médico las 24 horas del día, y, razón por la que asegura que no debieron inmovilizarle el vehículo.