En el 20 de Julio tienen colegio nuevo, pero con una vía de herradura

El tránsito de vehículos pesados habría empeorado el estado de la vía. Fotos: Hélmer Parra/ El Nuevo Día – Q’HUBO.

Los estudiantes del colegio Germán Pardo García, sede Jorge Quevedo, están próximos a estrenar un megacolegio, pero la dicha no es completa para estos habitantes de la comuna Dos, pues la única vía de acceso a las nuevas instalaciones se convirtió en una verdadera trocha.

Al parecer, los daños en la red de alcantarillado y el tránsito de vehículos pesados durante el desarrollo de las obras, hicieron que la  avenida 13 con Carrera Sexta se convirtiera en un verdadero dolor de cabeza para los habitantes del barrio 20 de julio.

Exigen el  arreglo 

Aunque los residentes del lugar coinciden en afirmar que el daño en la malla vial se registra desde hace varios años, aseguran que el tránsito de volquetas y vehículos pesados empeoraron el problema, razón por la cual, exigen a la Alcaldía y a Colpatria, que antes de entregar la obra, se lleven a cabo los trabajos de adecuación de la calle, por donde tendrán que transitar estudiantes, padres de familia y educadores.

Durante la obra, una volqueta cargada de recebo se hundió en la vía, lo que formó un gran hueco que ha generado malos olores y proliferación de vectores, que ponen en riesgo la salud de toda una comunidad.

Nadie responde 

“Es responsabilidad de la Alcaldía y de Colpatria, los dos nos tienen que solucionar. En este momento se pasan la responsabilidad entre ellos, y nos parece triste que vayan a entregar esto así, porque por aquí van a transitar niños de preescolar en adelante y esto es una calle de herradura”, cuestiona Rubiela Castro Marroquín, líder de la comunidad.

Los habitantes de la zona manifestaron su preocupación, ya que las obras del megacolegio están próximas a terminar, pero al parecer el arreglo de la vía está en veremos y mientras las entidades competentes les dan una solución, los vecinos deben de lidiar a diario con los malos olores que salen de las alcantarillas colapsadas. 

La situación también preocupa a los directivos de la institución, pues de no solucionarse dichos problemas, los niños y jóvenes tendrían que estudiar rodeados de malos olores y proliferación de vectores.

Dato: En el sector una volqueta se hundió debido al mal estado de la malla vial.

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