Egan Bernal, líder del Giro de Italia, declaró que la etapa disputada ayer entre Siena y Bagno di Romagna fue «difícil» por el trazado del recorrido, aunque admitió sentirse «feliz» porque la terminó bien. La etapa, con 212 kilómetros y cuatro puertos de montaña, dos de segunda categoría y otros dos de tercera, la ganó el italiano Andrea Vendrame.
El pelotón, en el que iba Bernal, llegó pasados 10 minutos a meta. La jornada 12 unirá hoy Ravenna y Verona con un recorrido de 198 kilómetros totalmente llanos. «Creo que necesitamos una etapa plana con seguridad. A veces, este tipo de fracciones son más difíciles, por lo que debemos estar concentrados. Tenemos que ir a tope todos los días y estar realmente concentrados», concluyó Egan.