Redacción Q’hubo. Jorge Andrés Ríos Tangua
Eco San Gil y Acusan libran desde hace un par de meses una lucha por quedarse con los clientes, lo que ha generado enfrentamientos y quejas en diferentes espacios.
Desde hace un par de meses los usuarios de servicios públicos de San Gil y la ciudadanía en general, se encuentran en la mitad de una ‘guerra comercial’ entre Acuasan – empresa de carácter público – y Eco San Gil, la marca privada que quiere competir en la recolección y disposición de basuras y aseo.
La entrada de un competidor privado representa un cambio en un negocio que históricamente en el municipio ha tenido un solo oferente: Acuasan. La disputa entre las compañías por ganarse el corazón de los usuarios se evidenció públicamente por primera vez en la celebración del día de los niños el pasado 31 de octubre, cuando con papayeras y regalos, los ‘bandos’ quedaron enfrentados unos a otros.
La imagen se dio en la calle 9 entre carreras 10 y 11, justo al frente de la Alcaldía.
Los encontronazos entre las partes se han trasladado a los barrios, como José Antonio Galán, en donde funcionarios de uno y otro lado han cruzado algunas palabras y además intentan con sus argumentos, unos reales y otros no tanto, quedarse con los clientes.
En este panorama la pregunta de los usuarios es si pueden o no cambiar de empresa, teniendo en cuenta que las denuncias por fallas en la prestación del servicio y falta de comunicación por falta de Acuasan eran altas, hasta que llegó la competencia.
Hasta el momento, según cifras entregadas por Eco San Gil, se han presentado 1.500 radicaciones de desvinculación de usuarios de Acuasan y otros 1.500 están por radicarse. La meta es llegar a por lo menos 10.000 usuarios a mitad de 2023, expresó Nelson Correa Lizarazo, director comercial y operativo de Eco San Gil.
Hermes Ortiz Rodríguez, alcalde de San Gil y presidente de la junta directiva de Acuasan, dijo que efectivamente se han recibido solicitudes de retiro por parte de
algunos usuarios del servicio de aseo y recolección de basuras, que están siendo estudiadas.
Aunque aseguró que este es un ejercicio de libre competencia, Ortiz dijo que si un usuario lleva menos de dos años con su matrícula o tiene alguna deuda con la compañía no podrá retirarse.
Al respecto, Correa explicó que los contratos de servicios públicos no pueden tener cláusulas de permanencia y si una familia desea cambiarse y tiene deuda con Acuasan ellos como Eco San Gil pueden pagarla y diferir el pago, como sucede con otros servicios.
Sobre este tema, Luis Medina Zambrano, personero del municipio, contó que la próxima semana se reunirá el Comité de Estratificación en donde se aclararán todos estos temas.
El defensor ciudadano también afirmó que lo importante es que cada una de las empresas cumpla con los lineamientos legales, respeten el derecho de los usuarios y garanticen la prestación de los servicios. Eso sí, dejando claro que quedarse con una u otra es una decisión que debe ser respetada.
En defensa de lo público
Desde que Eco San Gil hizo oficial su interés por entrar a un nuevo segmento del mercado, puesto que durante 12 años lleva trabajando de la mano con Acusan en la recolección y transformación de reciclaje, la empresa de servicios públicos del municipio y la Alcaldía iniciaron una campaña de promoción y defensa de la única empresa de carácter público que le queda a san Gil.
Ortiz confesó que la competencia los hizo mejorar en este tiempo, aceptando de paso las deficiencias que se estaban presentando. Uno de los puntos clave es la mala comunicación de Acuasan y sus procesos con la ciudadanía, a lo que el alcalde respondió que ya se estaba trabajando en este departamento y eso se estaba notando con el cambio de personal.
El alcalde sangileño no negó la preocupación y los daños que le puede generar a Acusan la pérdida de clientes, cuyos impactos económicos podrían obligar a replantear la organización y proyección de Acuasan.Al final, el mandatario tiene claro que la única forma de competir es con buenos servicios, si no lo hacen, perder una buena parte de los 22.600 usuarios se puede convertir en realidad.
El dato
22.600 usuarios de recolección de basuras y aseo tiene el municipio.