IBAGUÉ. Mientras arreglaban el andén de la vivienda ubicada en el barrio Montecarlo II, sector de El Salado, Jáiber Andrés Castillo Bolívar y Édgar Castillo, padre e hijo respectivamente, fueron sorprendidos por agentes de la Policía, quienes según su relato, arribaron de manera inapropiada para impedir el avance de la obra.
“Los señores llegaron, uno se resbaló y volteó la caneca donde teníamos el cemento. Mi hijo les dijo que fueran más educados y le dieron con el bolillo en el brazo derecho”, dijo Édgar, padre de Andrés, quien agregó: “Él les dio con un palo en el casco, se entró a la casa y de manera arbitraria entraron y lo capturaron”.
Por esta acción, Castillo Bolívar compareció ayer ante el Juzgado Segundo Municipal con Función de Control de Garantías, por violencia contra servidor público, y donde se explicó por parte de la Fiscalía que los uniformados llegaron por una llamada de la comunidad en la que afirmaron que se hacía una construcción ilegal.
“Es una invasión que está desde hace años y no es la forma para que ellos lleguen de esta manera. Nunca presentaron un permiso para impedir algo. El Policía se raspó una de las manos”, aseveró el adulto.
Elizabeth Bolívar, mamá del joven capturado, señaló que los uniformados la agredieron:
“Uno me alzó la mano y tengo el ojo derecho lastimado. Me dolía”, puntualizó la mujer.
Finalmente, Jáiber Andrés quedó en libertad, ya que la Fiscalía no tenía el material de prueba suficiente para pedir medida de aseguramiento y enviarlo a la cárcel.
