REDACCIÓN Q’HUBO. El 11 de marzo de 2004, el Deportes Tolima disputó hasta ese instante uno de los partidos más icónicos de su historia. Enfrentó al encopetado River Plate en el estadio Manuel Murillo Toro, por la tercera fecha del Grupo 6 de la Copa Libertadores. De estar ganando 2-1, pasó a perder 3-2.
Ese fue un duelo inolvidable, a pesar de la derrota, así como el de una semana después (18 de marzo), cuando por la cuarta jornada de la llave visitó al elenco ‘Millonario’ en el Monumental de Buenos Aires. Se perdió 1-0, cuando muchos creyeron que se caería por goleada, y de paso se dejó una grata impresión, por la entrega en dicho compromiso.
Hasta hoy, ese era el contrincante con más pergaminos que había enfrentado el Vinotinto y Oro desde su creación en 1954, ya que el imponente y pomposo Boca Juniors, también argentino, tomará el relevo esta tarde (5:15 p.m.) en La Bombonera, toda vez que allí medirá fuerzas con el club de la ‘Tierra Firme’ por la segunda fecha del Grupo G de la Copa Conmebol Libertadores 2019.
Desde que se conoció que la escuadra con 113 años de fundación sería contrincante de los ‘Musicales’ en el torneo de clubes más importante del Continente, se generó una enorme expectativa en la hinchada ‘Pijao’.
Tanto así que un considerable número de seguidores tolimenses se desplazó por vía terrestre y aérea hacia la Capital del Tango con el objetivo de acompañar a su equipo del alma en este duelo inédito.
Cerca de 500 personas serían las que estarían hoy alentando al Vinotinto y Oro en el escenario ‘Xeneize’, el cual tiene una capacidad para 49 mil espectadores (sentados).
Al parecer, por ser el estreno de Boca en casa en esta Copa Conmebol Libertadores, habría lleno en el estadio cuyo nombre oficial es Alberto J. Armando, en honor al presidente que estuvo a cargo de la institución por más de dos décadas.
Voz de aliento. Desde su llegada a Buenos Aires, los ‘Pijaos’ recibieron el calor humano de sus fanáticos. El ingreso del equipo al hotel 725 Continental fue una locura. Los encargados de la seguridad en dicha edificación se vieron en aprietos por la cantidad de personas cantando por el arribo de los futbolistas tras un vuelo de casi siete horas.
Pero aún así, la mayoría de los jugadores se mostraron contentos por la voz de aliento, y respondieron amablemente a las peticiones de fotografías e incluso videos de los hinchas que hicieron un esfuerzo por acompañarlos en Argentina.
Todas estas tomas audiovisuales se hicieron virales rápidamente en redes sociales. Incluso los mismos deportistas dejaron ver a través de sus cuentas la manera tan agradable como les dieron la bienvenida en su sitio de concentración.
Esto es sin dudas un aliciente importante para la ‘Tribu’, ya que deberá manejar la presión de competir en una ‘caldera’, empezando porque su vestuario, el visitante, se ubica bajo la tribuna norte, el lugar desde donde alienta ‘La 12’, la barra más representativa de Boca y una de las más fervorosas del mundo.
Son ellos quienes aseguran que La Bombonera no tiembla, sino que late, y estarán impulsando a un Boca Juniors que viene de menos a más esta temporada, y que en los torneos internacionales suele sacar siempre a flote su jerarquía. Por eso, el Deportes Tolima tiene claro que el de hoy, en Buenos Aires, es un partido para la inmortalidad.
Boca Juniors es el histórico. El que ha ganado seis Copa Libertadores. El que viene de perder la más reciente edición de este certamen, frente a nada más y nada menos que su archirrival River Plate.
Por lo tanto, es el equipo que tiene hoy la presión sobre sus hombros. Está obligado a ganar, porque el Deportes Tolima es un club sin historia internacional, sin los mismos pergaminos.
Y es esto lo que el Vinotinto y Oro debe aprovechar, toda vez que su rival podría confiarse. Al no tener nada que perder, la ‘Tribu’ podría jugar con tranquilidad, y con esto conseguir posiblemente un resultado histórico, o por lo menos un empate.
Además, el elenco dirigido por Alberto Gamero, que anoche realizó el reconocimiento de La Bombonera, llega motivado tras debutar con un triunfo 1-0 en Ibagué frente al brasileño Atlético Paranaense, vigente campeón de la Copa Conmebol Sudamericana.
Para este cotejo, el técnico Samario utilizaría prácticamente la misma nómina que venció al elenco de Curitiba. La única novedad sería el ingreso del defensa central costarricense Juan Pablo Vargas, por el lesionado Johnny Mostasilla.
Boca, con la ‘pesada’. Para la hinchada de Boca Juniors, el primer partido de Copa Libertadores en casa es especial, sin importar el rival. Por tal motivo, el club cuenta con que la boletería se venda toda, y todo indica el técnico Gustavo Alfaro utilizará lo mejor de la plantilla para el estreno internacional ante su afición.
El DT argentino formaría con un 4-2-3-1. La línea ofensiva estaría integrada por el experimentado Carlos Tévez, el talentoso Mauro Zárate y un viejo conocido, Sebastián Villa. Ese tridente se encargaría de generar peligro sobre el arco defendido por Álvaro Montero, con el artillero Darío Benedetto como punta de lanza.
El onceno ‘Xeneize’ llega a esta confrontación en gran forma, pues bajo la dirección de Alfaro acumula en el torneo de su país seis victorias, dos empates y apenas una derrota. En cuanto a la Copa, viene de igualar sin goles en su visita al boliviano Jorge Wilstermann.
Posibles formaciones.
Boca Juniors: Esteban Andrada; Julio Buffarini, Lisandro López, Carlos Izquierdoz, Emmanuel Mas; Nahitan Nández, Iván Marcone; Sebastián Villa, Carlos Tévez, Mauro Zárate; Darío Benedetto. DT: Gustavo Alfaro.
Deportes Tolima: Álvaro Montero; Juan G. Arboleda, Julián Quiñones, Juan Pablo Vargas, Danovis Banguero; Rafael Carrascal, Larry Vásquez, Carlos Robles; Luis ‘Cariaco’ González, Ómar Albornoz; Marco Pérez.
Recuerde. El uruguayo Esteban Ostojich será el juez central del compromiso y será asistido en las bandas por sus compatriotas Nicolás Tarán y Richard Trinidad.