La familia de Luz Amparo García Álvarez, asesinada el 31 de mayo por Henry Jaramillo, su expareja sentimental, no ha podido vivir el luto por la partida de su ser querido debido a los trámites legales que les ha tocado enfrentar. Ahora a eso se suma el temor que sienten ante las presuntas amenazas que han recibido del presunto feminicida, quien en su momento se declaró culpable, pero ahora se habría retractado.
Dolor en medio de amenazas
Entre lágrimas y con la voz entrecortada, Kelly Dalila Jaramillo García le contó a Q’HUBO el miedo que siente al pensar que su padre y verdugo de su mamá, pueda salir de la Permanente de Ibagué y hacerles daño, así como según ella, se lo hizo a Luz Amparo.
“Desde que mi mamá murió no hemos podido sentarnos todos a llorar, a recordarla porque entramos a una lucha legal para que la muerte de ella no quede impune. Este mes ha sido triste, se suponía que en este tiempo ella iba a estar con nosotros, era la fecha de nuestro grado y ella nunca se los perdía, siempre estuvo presente”, dijo con tristeza Kelly.
Días antes de que ella y su hermana recibieran sus títulos académicos (en atención a la primera infancia y enfermería), recibió una llamada que la dejó en ‘shock’: “El señor Henry Jaramillo me llamó a amenazarme, a decirme que no estuviera tan tranquila, que él pronto iba a salir. Después mis hermanas recibieron unos mensajes diciendo que estuvieran pendientes porque él está llamando a su familia diciéndole que está feliz porque muy pronto va a salir de donde está”, afirmó Kelly.
Se ‘echó para atrás’
Jaramillo se declaró culpable y mediante un video en redes sociales confesó que había asesinado a su expareja, sin embargo, la historia habría dado un giro inesperado para la familia de Kelly Dalila porque según ella, allegados de su padre contrataron una abogada y el presunto feminicida supuestamente cambió de parecer y afirmó que es inocente: “Entramos a un proceso legal para poder lograr que él pague por lo que hizo, él señala que fue un homicidio, que no quería hacerlo, él destrozó a mi mamá por dentro, eso no es un accidente, todo fue premeditado, luego llama a decir que él va a salir. Le dije que él no era mi papá, que él había muerto con mi mamá, y me contestó que eso estaba por verse”, señaló la denunciante.
Mientras Jaramillo está en la Permanente Central, los hijos de doña Luz Amparo esperan que las autoridades establezcan una fecha para una nueva audiencia que habría quedado agendada para los próximos dos meses.
Ante la situación y la zozobra, la familia Jaramillo se dispersó por el temor de que el presunto feminicida los encuentre y cumpla con las amenazas. Kelly Dalila y sus hermanos esperan que la muerte de su madre no quede en el olvido: “Quiero que se haga justicia, no fue un homicidio, es un feminicidio.
No quiero que quede impune, que hayan condenas severas para este tipo de personas que atentan con la vida de mujeres inocentes, dignas y con todo el derecho a la vida”, puntualizó la femenina.
