Habitantes del barrio Nacional de Ibagué, en la calle 35 con avenida Ferrocarril, están inconformes con un trabajo que efectuó personal del Ibal la semana anterior.
Según el testimonio de los ciudadanos, desde hace tres meses, debido a la ruptura de un tubo de la red de acueducto, un chorro de agua limpia fluye día y noche por el sector.
Debido al desperdicio del preciado líquido y para evitar daños en las construcciones, los usuarios reportaron el daño a la empresa y a finales de mayo instauraron una acción de tutela.
“Arreglo a medias”
Tras la insistencia, los trabajadores del Ibal llegaron y cambiaron unos tubos de la red matriz. Sin embargo, para sorpresa de los usuarios, el cambio que hicieron no solucionó la fuga de agua, según informaron.
“El agua sigue saliendo y pasa a un metro de la puerta principal de mi casa. La situación ocasiona humedad subterránea y nos preocupa porque la vivienda es de tres pisos y la construcción puede terminar afectada”, expresó Fredy Rodríguez, un habitante del barrio.
“Abrieron semejante hueco en la vía, una vía principal, y la dejaron funcionando a un solo carril. Según nos informó una ingeniera del Ibal, no habrían podido terminar el arreglo ya que falta un tubo y lo deben comprar en otra ciudad. Es decir, habrá agua fluyendo y hueco para rato. ¿Por qué no arrancaron el trabajo cuando tenían todos los elementos a la mano?”, cuestionó el afectado.
Q’HUBO le informó el caso a la oficina de Prensa de la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado. Desde allí aseguraron que trasladarían la inquietud al área de quejas.
Tutela negada
Aunque una familia instauró una tutela para amparar el derecho a la salubridad pública y la vivienda digna, el Juzgado Octavo Civil Municipal la negó. Según el togado, no “logró evidenciar el perjuicio irremediable que se está causando a los accionantes, máxime que tal y como lo informa la empresa de acueducto accionada, las aguas que brotan sobre la superficie son catalogadas como potable y no aguas negras”.
