REDACCIÓN Q’HUBO
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Luego de 96 horas del cese de actividades del servicio de transporte colectivo en Ibagué, y aunque se esperaba una posible solución del conflicto entre la Administración municipal y el gremio de trabajadores de las busetas, la diferencia no fue resuelta. Hurtado y la mesa convocada, incluyendo a delegados del Ministerio de Transporte, se quedaron esperando a los manifestantes en la mesa de diálogo.
La idea de la segunda jornada de encuentro era escuchar los argumentos de las partes y que los funcionarios enviados desde Bogotá tuvieran la posibilidad de dirimir en la disputa por el recaudo del futuro Sistema Estratégico que la ‘Ibagué Vibra’ de Andrés Hurtado dejó en manos de la empresa Infotic de Manizales. Sin embargo, al no hacer presencia los representantes de las empresas Cotrautol, Expreso Ibagué y Movilizando a Ibagué, no se avanzó en la negociación.
En lugar de ello, se escucharon intervenciones de integrantes de sectores como plazas de mercado, restaurantes, deportistas, encuestadoras del Sisbén y campesinos; docentes y trabajadores de la salud, quienes clamaron que se reactive cuanto antes el servicio de busetas.
Por otro lado, el concejal César Franco aseguró que existe una supuesta modalidad de corrupción de las tres empresas de transporte público de la ciudad, quienes según sus señalamientos, obligarían a propietarios de vehículos a tanquear únicamente en estaciones de servicio autorizadas por ellos.
Finalmente, el gerente del Sistema Estratégico de Transporte de Ibagué, César Fabián Yáñez, hizo una exposición de los costos totales de los equipos para la implementación de este, los cuales ascienden a más de 8 millones de dólares. Asimismo, el alcalde Andrés Hurtado dijo que se tuvo la voluntad de diálogo y acusó a los transportadores ausentes de “darle la espalda a 549 mil ibaguereños”. Y desmintió los señalamientos respecto a una supuesta comisión que cobraría por el contrato con Infotic.
Sancochada frustrada
En la mañana, integrantes de la ‘ola naranja’ llegaron hasta la Plaza de Bolívar con ollas e ingredientes para preparar una sancochada frente a la Alcaldía, a modo de protesta, pero las autoridades intervinieron para prohibirles llevar a cabo la actividad. Un conductor que estaba presente, dijo: “No estamos haciendo desorden. La gente está indignada, ¿qué más quieren? ¿que la ciudad se paralice totalmente? Si nos toca hacer protestas todos los días, lo haremos”. Luego de la tensión, los profesionales del volante decidieron retirarse.
Los que apoyaron
Las centrales sindicales del Tolima: CGT, CTC y la CUT, manifestaron su apoyo al paro del gremio de busetas de la ciudad y en conjunto con Simatol, se sumaron al cese de actividades de la ola naranja. Jaime Cortés, presidente de la CGT, indicó que el Comando Departamental Unitario rechaza la manera cómo fue utilizada la Fuerza Pública con los conductores el pasado martes en la 37 con Quinta. Por su parte, varios taxistas de la ciudad se sumaron al ‘plan tortuga’ implementado por los conductores de busetas y marcharon por la Quinta en apoyo a la protesta.
TOME NOTA
Al cierre de esta edición, el alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, solicitó que se les quite la habilitación a los integrantes de la ‘ola naranja’ que están en paro y sugirió que se habilite una licencia provisional para quienes estén en disposición de prestar el servicio.
DATO
Sólo dos propietarios de busetas hicieron presencia en la mesa de diálogo, pero tras sus intervenciones, decidieron retirarse.
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