Los planteamientos se hacen a través de los diálogos comunitarios, que promueve la Unidad para las Víctimas en los cuatro municipios PDET del sur del Tolima y en Armero Guayabal y Valle de San Juan.
El objetivo de la estrategia «Diálogos comunitarios», que implementa la territorial Central de la Unidad para las Víctimas en el Tolima, es la participación directa y propositiva en la actualización de los planes de retorno y reubicaciones para el avance en la superación de la situación de la vulnerabilidad y el arraigo territorial e integración comunitaria entre las personas afectadas por desplazamiento forzado que han regresado a sus territorios.
En los municipios con Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), de la región Sur del departamento se concentra el mayor número de abordajes comunitarios. En Ataco participa la comunidad de siete veredas de oriente; en Planadas los encuentros se realizan en los corregimientos de Bilbao y Gaitania; en Chaparral se trabaja con la población de Gualara y Santa Helena en zona rural, y en Rioblanco se desarrollan en el corregimiento de Herrera y el centro poblado de Maracaibo.
Yomari Bueno, líder de la verada San Isidro del municipio de Rioblanco, manifestó que expresar las necesidades para hagan parte de los ajustes de los programas para la población retornada es un avance significativo “pues por ejemplo en nuestro caso hablamos de la necesidad de la electrificación en las veredas, el mejoramiento de vivienda y el acueducto”.
Luego de hacer las respectivas actualizaciones, se pasará a la mesa de retornos y reubicaciones para poder socializar con las entidades pertinentes cada una de las peticiones y buscar la aprobación de las mismas en los Comité Territoriales de Justicia Transicional en los que participan las alcaldías, mesas de víctimas y demás entidades del estado que hace parte del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (SNARIV).
“Estamos realizando una tarea sumamente interesante y juiciosa que nos va a permitir identificar necesidades de las comunidades y focalizar los esfuerzos conjuntos para afianzar los programas y proyectos que desde la Unidad adelantamos para garantizar que se consolide el regreso y/o reubicación, y por sobre todo que la población objeto no vuelva a sufrir los rigores del desplazamiento”, afirmó la directora territorial Central de la Unidad, María José Dangond David.
En el Tolima, estas acciones se adelantan en 12 comunidades. Los demás municipios beneficiados son Armero Guayabal con la población reubicada de la hacienda Potosí y el municipio de Valle de San Juan en el que el año anterior se hizo el cierre del Sujeto de Reparación Colectiva de la vereda El Neme.