Un grupo de comerciantes de la calle 60, de Ibagué, abordó a los protestantes que desde hace varios días lideran bloqueos en esta zona de la ciudad. El jueves en la noche, les propusieron que trasladaran la protesta a otro sector porque los clientes han disminuido en la zona de manera considerable.
“A las personas les da temor pasar por acá. Así como ustedes exigen el derecho a la protesta, nosotros también tenemos derecho al trabajo”, le dijo Mario Arango a los jóvenes.
“Los derechos de los ciudadanos existen hasta que se afectan los derechos de los demás. La protesta no puede afectar el derecho a la movilidad, al trabajo y a la tranquilidad”, expresó por su parte César Callejas, en redes sociales.
Otro gremio que ha asegurado que los bloqueos los ha afectado, son los conductores de buseta. Según el gremio ‘naranja’, al día están transportando apenas unos 60 pasajeros y duran horas metidos en trancones.
“Las personas están evitando salir de sus casas y si sigue así, nos va a tocar parar a nosotros también. Estamos trabajando a pérdida”, advirtió José Rojas.
Los taxistas también han asegurado que atraviesan una complicada situación económica porque algunos no estarían haciendo al día ni lo de la cuota que le deben entregar al propietario del vehículo y la estarían asumiendo de su bolsillo.
Poco flujo
Por su parte, voceros de los centros comerciales ubicados en la ‘Milla de Oro’ han señalado que aunque si bien es cierto que los jóvenes no han dañado la estructura de ningún local y los centros comerciales siempre han tenido las puertas abiertas, el flujo de visitantes también ha disminuido.
Mientras tanto, en redes sociales las opiniones están divididas. Algunos ciudadanos aseguran que los jóvenes que han liderado los bloqueos en la calle 60 lo han hecho “de manera pacífica y están protestando por el bien del pueblo”.
Dato
El abogado ibaguereño Andrés Zambrano, radicó ante el Consejo de Estado una tutela contra el presidente Iván Duque y otras entidades “para evitar el uso excesivo e indiscriminado de la fuerza, y la violación de los derechos fundamentales a la integridad, salud y vida de las personas que ejercen su derecho a la protesta”, explicó el profesional.
