IBAGUÉ. La Policía del Tolima en coordinación con la Fiscalía desarticuló una organización delincuencial denominada como ‘Los Kikos’ o ‘Las muñecas del microtráfico’, la cual se dedicaba a expender alucinógenos en El Espinal y el corregimiento de Chicoral.
Lo curioso es que la cabeza de la banda manejaba los ‘hilos’ del negocio desde la cárcel de Picaleña.
El caso. De acuerdo con las autoridades, una mujer conocida con el alias de ‘Inés’ o ‘Gallineta’ era la cabecilla de la banda pese a que permanecía recluida en el Coiba de Picaleña, por lo que se comunicaba por medio de cartas o llamadas telefónicas con su hija, alias ‘Maira’, para la venta de sustancias en pequeñas dosis en establecimientos públicos, discotecas, parques, instituciones educativas y en ocasiones expendían a domicilio.
Con el fin de evadir a las autoridades la estructura utilizaba menores de edad para la actividad.
Al parecer ‘Los Kikos’ o ‘Las muñecas’ movían cerca de 85 millones de pesos mensuales.
Para su desarticulación la Sijín Detol identificó a un grupo de personas en la ‘Ciudad de la Tambora’, con diversos roles al interior de la red de microtráfico, de los cuales fueron retenidos 15 en cerca de 13 allanamientos simultáneos en dicho municipio y en el corregimiento de Chicoral. Además identificaron junto a ‘Inés’ a varios colaboradores de ‘Los Kikos’ al interior de la cárcel de Ibagué.
Durante las diligencias fueron incautados equipos celulares, dinero y varias dosis de estupefacientes. Se prevé que en el transcurso del día el grupo sea judicializado en audiencia.
Además. Por medio de agentes encubiertos e interceptación de comunicaciones se conoció que dos miembros de la estructura, presuntamente coordinaban encuentros sexuales de hombres con adolescentes menores de edad, en su mayoría, por las que cobraban una alta suma de dinero.