REDACCIÓN Q’HUBO/qhuboibague@gmail.com
Las recientes lluvias que terminaron por destruir nuevamente el camino rural que de Boquerón conduce a la vereda El Cural, en Ibagué, tiene enojados a los residentes, pues al tener que transitar entre el lodazal, se sienten burlados porque desde hace años les prometieron una obra que no avanza.
Según el líder de la vereda El Cural Juan Darío Soto, el proyecto inició desde 2017 cuando Andrés Fabián Hurtado hizo parte del gabinete de Óscar Barreto Quiroga en la Gobernación del Tolima, luego pasaron años de espera, hasta que este año les dijeron que iban a iniciar.
“Cuando Hurtado subió al poder, en un principio dijeron que la obra iba a ser compartida entre Alcaldía de Ibagué y la Gobernación, luego ellos pelearon y nos dijeron que solamente iban a intervenir 500 metros de la entrada.
“En marzo nos reunieron, estuvo el contratista, nos prometieron que en dos meses estaría lista la obra, antes de las fiestas de julio echaron una gravilla y no volvieron; pasaron los meses y nunca pavimentaron”, contó Darío Soto.
El líder de la vereda indicó, además, que aunque le han preguntado al contratista por la finalización de la obra, este les responde que también está con una pavimentación en Charco Rico.
“Como está en dos frentes de trabajo, pues no trabajan acá y me imagino que allá tampoco y les dirán que es porque trabajan acá, ya se va a acabar este mandato y a manos de quién quedamos”, agregó el también miembros de la Junta.
Con este invierno repentino, el agua se llevó lo poco que quedaba de triturado y como nunca fabricaron unas cunetas, pues el agua forma surcos y huecos que terminaron por dañar el paso.
Ante este problema, los vecinos les va a tocar ‘armarse’ con palas y picas para ellos mismos arreglar su camino.
La cifra
200 familias están afectadas por la falta de una carretera en buen estado.
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