IBAGUÉ. A través de redes sociales, Zury Uribe, propietaria de ‘Pinki’, emprendió una campaña para recolectar fondos y poder efectuarle a su mascota una cirugía de cráneo que requiere de manera urgente. El animal, fue atacado por el perro de una vecina. La mujer no quiso responder.
La historia
Hace un año, Zury y su mamá, decidieron brindarle un hogar a un perrito criollo que deambulaba por el barrio Ciudadela Comfenalco de Ibagué. Conmovidas por las necesidades que padecía, lo recogieron y lo bautizaron ‘Pinky’.
Todo iba bien hasta el miércoles, cuando el ‘peludo’ salió, como de costumbre a hacer sus necesidades a la calle, y el perro de la vecina lo revolcó. Casi lo mata.
Propietaria no responde
De acuerdo al testimonio de la propietaria, un vecino logró separar a los animales. Sin embargo, tras el ataque ‘Pinky’ quedó con un hueco en la frente. Según el veterinario, tuvo fractura de cráneo. “Ese día lo lleve a la veterinaria y estuvo allí toda la noche. Me cobraron $140 mil y cuando le dije a la propietaria del perro agresor que me colaborara con los gastos, lo que hizo fue tratarme mal. No me quedó de otra sino emprender una campaña en redes sociales pero pocas personas me han colaborado”, añadió la joven.
Datos de interés
1. Según la Corte Constitucional, los propietarios o tenedores de perros peligrosos son responsables de los daños y perjuicios que ocasionen a las personas o bienes.
2. Por ley, está prohibido que los perros de razas fuertes deambulen en espacio público, como lugares abiertos o medio de transporte público.
3. Un perro de raza peligrosa, debe salir con bozal y collar. Quienes incumplan las normas, pueden recibir sanciones entre 98 mil pesos y 786 mil pesos.
$600 mil cuesta la cirugía que el ‘peludo’ necesita, más los gastos de recuperación.