IBAGUÉ. José Olmedo Bonilla Suárez, de 17 años de edad, salió la tarde del martes a acompañar a unos amigos a recoger a unas compañeras en el Liceo Nacional. Sobre las 6:30, se provocó una gresca frente al establecimiento Tecnicell, ubicado en la carrera Quinta, número 30-31. Allí un muchacho de tan sólo 15 años de edad hirió a José Olmedo, quien llegó sin vida al Hospital San Francisco.
El administrador del establecimiento indicó que “hubo una riña entre los estudiantes del Colegio San Simón y el Cencat. Uno de los bandos que estaba metido en el pleito procuró protegerse al interior del negocio. Los demás les reclamaban que salieran a enfrentarse a golpes, porque al parecer hubo una pelea anterior en la que uno de ellos había resultado lesionado”, afirmó.
El comerciante agregó que cerró la persiana metálica de su negocio, y permitió que los muchachos agredidos entraran: “La dejé abierta más o menos a la altura de la rodilla. Hubo unos que debajo de la reja le lanzaron patadas al muchacho (José Olmedo), y él mismo, seguramente ofendido en su orgullo, levantó la reja desde adentro”, sostuvo.
“Apareció el muchacho del San Simón absolutamente de la nada, con la navaja en la mano y le proporcionó las heridas al joven. Cuando iba saliendo le dije: ‘Apriétese el cuello’, pero cuando vio a los policías se soltó la herida para mostrarles. Dijo: ‘Miren lo que me hicieron’. Cuando se destapó, manchó todo el piso. Tomaron un taxi”, puntualizó el administrador del negocio.
Finalmente, dijo que se había alertado en varias oportunidades a las autoridades sobre varias problemáticas del sector, como consumo de alucinógenos y constantes riñas en la zona: “La juventud está totalmente desbordada. Ven que ser ‘maloso’ está de moda, y resultan acarreando consecuencias devastadoras de este tipo”, concluyó el funcionario del punto de telefonía.
Mamá entregó al agresor
La madre del muchacho de 15 años y estudiante del Colegio San Simón que le propinó las mortales heridas a José Olmedo Bonilla Suárez, indicó que se enteró de todo en noche del martes: “Vinieron a decirme que me necesitaba la Policía. Fuimos a buscarlo a un café Internet donde a veces va, pero no estaba. Dimos vueltas por todo el sector, cuando lo encontramos como a las 10 de la noche”, afirmó. La mujer agregó que su hijo le dijo que iba subiendo por la Quinta con su hermano de 13 años, cuando comenzó la pelea: “Como que le tiraron puntapiés al occiso, entonces el muchacho miró y le echaron la culpa a él (señalando al niño de 13 años). Cuando llegó mi hijo le dijeron que le estaban pegando al hermano, y fue cuando reaccionó. Le pegó una patada al muchacho para empujarlo y él se la devolvió, fue cuando hizo así (levantó la mano), y sintió que le pasaron la puñaleta”, sostuvo.
“Yo fui con él hoy a las 6 de la mañana a la Fiscalía. Hablé con él, le dije: ‘Papito, es mejor que usted se entregue y diga las cosas de lo que pasó’, porque yo creo que no lo hizo con ninguna intención. Es un niño que está estudiando, de pronto es muy callado, la gente dice que es muy serio”, concluyó en medio del llanto la inconsolable mujer.
Iba a ser papá
José Olmedo había estudiado hasta noveno grado en el Colegio Cencat. Trabajaba en un negocio familiar de diseño de calcomanías y vivía en el barrio Santa Ana de la capital tolimense. Un allegado de la víctima indicó que días atrás había ocurrido una pelea en el sector de El Pedregal durante una fiesta.
Su novia estudia en el Colegio Los Andes y tiene cinco meses de embarazo. Su madre falleció y el hoy occiso vivía con sus tíos.
