REDACCIÓN Q’HUBO
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Después de varios tropiezos en la obra de las piscinas de la calle 42 con Quinta de Ibagué, la ciudadanía esperaba que el nuevo contratista encargado de terminar dicho escenario cumpliera con los plazos acordados, sin embargo, hoy vence el contrato y los trabajos en el sitio no han avanzado más del 40 por ciento.
El proyecto
La Unidad Deportiva de la calle 42 con carrera Quinta de Ibagué fue construida para albergar los IX Juegos Nacionales de 1970 y estuvo al servicio de los deportistas tolimenses durante 45 años, hasta 2015, cuando la ciudad fue sede de una nueva versión de dichas justas y se firmaron contratos de obra para su remodelación.
En esa ocasión, se destinaron $37 mil 300 millones para el mejoramiento de todo el complejo deportivo y de ese presupuesto, tres mil millones de pesos eran para las piscinas olímpicas. Sin embargo, dicha obra, al igual que los demás contratos, registraron problemas, por lo que la administración de esa época otorgó más plazo al constructor para terminar las piscinas; pero ni eso fue suficiente para entregarlas en su totalidad.
Siguieron los problemas
Durante la alcaldía de Guillermo Alfonso Jaramillo, se firmaron nuevos contratos para reconstruir el complejo deportivo de la 42, entre esos el de las piscinas, pero dicho proyecto otra vez se frustró, debido a que siete meses después de adjudicada la obra, esta no avanzó más del seis por ciento y de nuevo fue necesario liquidar el contrato, que al final no avanzó más del 29 por ciento.
En la actual administración, se abrió la licitación una vez más, pero fue declarada desierta varias veces debido a la negativa de las aseguradoras a expedir pólizas de cumplimiento para amparar la obra, a causa de que ya se había siniestrado en dos ocasiones. Superado el problema, adjudicaron un nuevo contrato, pero cuando fueron a ejecutarlo, hallaron problemas constructivos y de diseño, dejados por el anterior contratista.
LA OBRA EN LA ACTUALIDAD
El colectivo ‘En Ibagué Escenarios Deportivos Ya’, efectuó una visita a la obra esta semana y según informó, encontraron que “sigue saliendo a flote la mala planeación”, al tiempo que aseguraron que los diseños y rediseños quedaron mal hechos y el avance de la obra está estancado entre el 33 y el 35 por ciento, cuando en lo programado tendría que ir en más del 90 por ciento. También explicaron que el contrato finaliza hoy, por lo que la Administración municipal podría hacer una prórroga. Asimismo, explicaron que para diseñar un plan de contingencia es necesario tener un balance y ya están efectuándolo. Otro de los aspectos que resaltó el colectivo fue la posible iliquidez del contratista, así como “situaciones administrativas internas que han obstaculizado el segundo desembolso”. A esto habría que agregar presuntas deudas a proveedores y personal que labora en la obra, así como otros inconvenientes: “equipos de bombeo que habían quedado de 2015, fueron robados y los tanques y arena de filtros no sirven. Esos equipos se están cotizando, llegarían en cuatro meses. Se necesita construir ocho pilotes más para soporte de gradería”, dijeron representantes del colectivo.
TOME NOTA
La ejecución del contrato comenzó el 16 de agosto de 2022 y tenía un plazo de ocho meses, el cual no se cumplió. Debido a esto, la Alcaldía le otorgó al constructor cuatro plazos más: dos de un mes cada uno y dos más de 15 días, los cuales se vencen hoy.
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