IBAGUÉ. “El mieroles a las 2:20 timbraron en la casa, le dije a la enfermera que abriera, ella medio abrió, empujaron la puerta y entró un señor negro que le puso un revólver en la cabeza a la auxiliar y después otro señor grueso alto y me puso revólver en mi cabeza”: Así describió Robert Gino Quintero el hurto del que fue víctima.
Robert Gino cuenta con desesperanza cómo “a los 10 minutos llegó otro (hombre), entraron a mi pieza donde estaban mis objetos personales, me llevaron a la cocina, los otros dos revolcaron la casa y el otro mi pieza, se llevaron un Cpab (equipo de ventilación invasiva), que sirve para oxigenar mis pulmones, porque tengo deficiencia pulmonar, y está valorado en dos millones 500 mil pesos, cadenas de oro, plata y una cámara de video”.
Robert Gino es cuadrapléjico desde hace tres años, por lo que tiene que permanecer en una silla de ruedas y acompañado de una enfermera o una persona que lo asista para ingerir sus alimentos, y para sus otras necesidades.
Ese día como de costumbre Robert Gino se encontraba con una asistente en la casa de su hermana, ubicada en la manzana seis casa 20 del barrio Terrazas del Tejar, Comuna 12 de la Ciudad, cuando los tres sujetos entraron, le hurtaron sus ahorros y el equipo médico que necesita para sobrellevar su discapacidad.
Poco después de que se salieron los ladrones, la enfermera que acompañaba a Robert Gino, quien estaba amarrada, logró soltarse y llamar a los vecinos para que los auxiliaran.
SIN PENSIÓN
Rogert Gino, de 43 años, era soldador de carros en Bogotá, y hace 3 años una operación lo dejó sin movilidad del cuello hacia abajo; además, por un mal procedimiento perdió una man: “Un médico me operó de un nervio de la cabeza a la médula para quitarme un dolor crónico, me dijeron que iba a quedar normal y cuando desperté no respondía las piernas”.
Además ha luchado hace seis años para lograr la pensión, pero “hace 15 días estuve en Bogotá y la negaron de parte del Instituto de Seguros Sociales, ISS”.
EN CIFRAS: 5 millones 500 mil pesos, cálculo de lo hurtado.
NO OLVIDE: Lo que sorprende al afectado es que los ‘cacos’ no se llevaron ni el televisor, ni el computador. no señala a ninguna persona, pero sospecha del robo.
