Luego de que el presidente Iván Duque anunciara un aumento del 3.5% en el salario mínimo para el año 2021, que quedará entonces en $908.526, con un auxilio de transporte de $106.454, las centrales obreras expresaron su rechazo al incremento, aduciendo que no se compadece con la pérdida de ingresos en medio de la pandemia ni pone dinero para los sectores más desfavorecidos del país.
En la mesa de concertación, las centrales obreras habían propuesto un salario mínimo de un millón de pesos, más un auxilio de transporte de 120.000 pesos. Por su parte, los empleadores habían propuesto un aumento de 2,7% para el salario y de 5,49% para el auxilio de transporte.
Diógenes Orjuela, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, afirmó que la cifra, que supone un aumento de 1.000 pesos diarios, no se ajusta con la realidad nacional y desconoce la necesidad de reactivación económica que requiere de un incremento en los ingresos de los colombianos.
“No introduce dinero en los bolsillos de los sectores menos favorecidos. No se compadece con la pérdida de los ingresos que tuvieron los sectores del salario mínimo de 12.2% ocurridos en el presente año en la pandemia”, afirmó Orjuela.
El presidente de la CUT afirmó que a raíz de este bajo aumento del salario mínimo y los anuncios de reformas laborales y pensionales continuarán movilizándose en el año 2021.
“Desde ya estamos anunciando que en el primer trimestre realizaremos una gran movilización. Rechazo absoluto frente a este mísero incremento de escasos mil pesos en el salario mínimo”, dijo el líder de la CUT.
Percy Oyola, primer vicepresidente de la Confederación General del Trabajo (CGT), afirmó también que la cifra decretada por el gobierno es muy distante a la solicitada por parte del movimiento sindical en la mesa de concertación y deja una gran diferencia con la aspiración planteada por los trabajadores.
“La CGT rechaza el incremento del SMMLV $908.526, no atiende la canasta básica como lo establece la Constitución, no contribuirá a reactivar la economía, ni tampoco es la decisión histórica que un país necesita en la peor crisis económica y social en décadas”, escribió la Confederación en su cuenta de Twitter.
La Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) también reaccionó al decreto del aumento del salario mínimo y afirmó que condena a la pobreza a millones de familias en el país y que amplía la desigualdad social en Colombia.
“El salario mínimo para 2021 es un irrespeto. Representa condenar a la pobreza a millones de familias y ampliar la desigualdad social en el país. Otra muestra del talante de este gobierno, que favorece a los grandes capitales y a sus amigos, pero se ensaña con el Pueblo”, escribieron los docentes en su cuenta oficial de Twitter.
Algunos sectores políticos también expresaron su rechazo al aumento del 3.5%. Por ejemplo, Katherine Miranda, representante a la Cámara, escribió que el aumento de 30.000 pesos es en realidad una burla
“No mientan. El salario mínimo subió 3,5% y quedó en 908.526 pesos. Un incremento de 30.723 pesos!!!! Leyeron bien, 30 mil pesos! #SalarioMinimoEs Una burla!”, tuiteó la congresista.
Otra en reaccionar fue Sandra Ramírez, senadora por el partido Farc: “Mientras que el colombiano de a pie, el que se rebusca el pan de cada día se va a ganar en 2021 $1.014.980 con aux. de transporte, los Congresistas recibiremos $34.417.339. Esto es una burla y una cachetada para los colombianos. @IvanDuque ¡Respete!”.
Apoyo al incremento del salario
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, afirmó que consideran que el aumento del salario mínimo es ponderado y generoso, teniendo en cuenta el crecimiento negativo de la economía colombiana este 2020, la productividad negativa y la inflación del 1.5%.
“Permite por un lado incrementar varios puntos en el poder adquisitivo de los trabajadores y por otro lado, preservar las posibilidades de recuperar el empleo perdido y generar nuevo empleo para los colombianos”, afirmó Cabal.
Jorge Enrique Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), expresó también su respaldo al porcentaje de aumento al salario mínimo y afirmó, en diálogo con Caracol Radio, que el aumento es responsable y aterrizado con la realidad económica del país.
“Es lo responsable con las condiciones económicas de Colombia. Hay que recordar que la inflación seguramente estará por debajo del 1.7 para este año, la productividad fue negativa, tenemos la tasa de informalidad laboral más alta que tenga Colombia en sus cuentas en las últimas décadas y por supuesto el tema del desempleo. Hay que lograr un equilibrio”, explicó.
Bedoya enfatizó en que aunque todos quisieran un mayor ingreso, las condiciones económicas del país no lo permiten en este momento.
Según el ministro del Trabajo, Ángel Custodio Cabrera, el aumento del salario mínimo es similar al del año pasado “cuando hubo un crecimiento del 3.3% vs. este año, que tenemos un decrecimiento del -6.6%. Es una respuesta para mantener el poder adquisitivo sin afectar la reactivación”.
Cabrera enfatizó en que el Gobierno Duque es el que más ha aumentado el salario mínimo. “Este es el gobierno que más ha aumentado en términos reales el salario mínimo desde 1985. En lo que va de Gobierno el acumulado es del 7%”, afirmó.