IBAGUÉ. Diego Alexander Olaya Mora fue enviado a la cárcel de Picaleña señalado por el atraco a un conductor de taxi, en la comuna Ocho de la Ciudad, en el que también habrían participado cuatro personas más que evadieron a las autoridades. Al parecer el hombre tenía vigente una detención domiciliaria por el mismo delito.
Hechos. La víctima, conductor de un rodante afiliado a Megataxi, recogió a dos hombres y una femenina en la calle 37 con avenida Ambalá que pidieron ser trasladados hasta el barrio Nuevo Combeima.
La Fiscal 16 Seccional de la URI dijo en audiencia que el ‘trío’ de presuntos ladrones le pidió al profesional del volante que detuviera el ‘amarillito’ en una zona desolada a la que llegaron dos sujetos más.
De repente Olaya Mora esgrimió un arma blanca tipo cuchillo mientras que sus cuatro ‘compinches’ le arrebataron a la víctima dinero en efectivo, el celular y elementos personales que posteriormente serían valorados en tres millones de pesos.
La representante del ente acusador agregó que una vez se alzaron con el ‘botín’ el grupo de ‘cacos’ le dijo al hombre que arrancara o lo ‘chuzaban’.
Persecución. El afectado arrancó y cuadras más adelante halló una patrulla motorizada de la Metib con la que emprendió la búsqueda de los cinco sujetos. Aparentemente Olaya Mora fue alcanzado, pero la comunidad habría intercedido con agresiones en contra de los policiales para evitar la aprehensión y hubo un intento de asonada. Al hombre le hallaron en su poder el arma blanca que utilizó para el atraco.
Denuncia. En la diligencia judicial se conoció que la víctima fue contactada telefónicamente para que no denunciara el caso y a cambio le reintegrarían el monto de lo hurtado. Además el interlocutor motivó al conductor de la ‘mancha amarilla’ para que dijera que las autoridades le tenían bronca al investigado y que el hurto fue cometido por otras personas, pero el afectado no aceptó dichas pretensiones.
‘Historial’. La Fiscalía acotó que el hombre tenía vigente una detención domiciliaria, a la que accedió en marzo del año pasado cuando salió de un establecimiento carcelario. Sin embargo el beneficio fue revocado y en la actualidad era requerido por el órgano de la justicia.
El Juzgado Octavo de Garantías dictó una medida de aseguramiento intramural en contra del sujeto.