La Federación Colombiana de Fútbol y la Dimayor recibieron este miércoles el protocolo para el reinicio del Fútbol Profesional Colombiano, con el cual cambiarán muchas cosas en el balompié nacional, empezando por los entrenamientos individuales, que están planeados para la tercera fase, denominada entrenamiento bajo riesgo.
Antes de llegar allí, los 36 clubes del rentado nacional deberán cumplir con las tres fases previas de Planeación, Alistamiento y Condición de salud, donde los jugadores, cuerpo técnico y demás seleccionados entre las 40 personas que estarán activas del equipo, deben cumplir con todas las medidas de bioseguridad y contar con pruebas que acrediten que son negativos para Covid-19.
Los clubes deben asegurar que todos los jugadores que vayan a hacer parte del entrenamiento lleguen en su vehículo personal o transporte personalizado individual privado, con la ropa de entrenamiento, sin compañía y que el recorrido sea de la casa a la sede de entrenamiento, sin parar ni abrir las ventanas de los automóviles.
Las personas que no cuenten con vehículo usarán transporte del equipo con un máximo de 11 pasajeros, incluido el conductor del bus con cabina. Allí se debe mantener una distancia física entre personas de dos metros, portar tapabocas y utilizar ropa distinta a la que usará durante el entrenamiento, la cual depositará en una bolsa al llegar al entreno, manteniendo siempre la distancia física.
El Entrenamiento bajo riesgo tendrá una duración de 28 días, en los cuales se pondrán a punto los jugadores de la plantilla de 27 jugadores seleccionados en el proceso, los cuales serán divididos en grupos de máximo diez personas para realizar las sesiones.
Los entrenamientos de los arqueros serán en una jornada aparte de los jugadores, estando obligados a usar guantes, los cuales no podrán escupirlos durante el entrenamiento. La práctica de los suplentes, es decir, los cinco jugadores espejo que se elegirán en una primera lista, se realizarán en presencia de una persona del cuerpo técnico.
Entre las recomendaciones dadas por el Gobierno Nacional, en cabeza del Ministerio de Salud, se encuentra que el personal de vigilancia debe situarse a la entrada del campo deportivo y solo permitir el ingreso de las personas que se encuentran dentro del listado autorizado.
El utilero debe ser el primero en llegar al complejo, pasar por el examen médico al ingreso, retirar del cuarto de útiles los implementos y equipos que se requieran para el trabajo y definir el lugar donde se ubica cada jugador, garantizando una distancia mínima de tres metros entre sí para alistarse.
Los miembros del cuerpo técnico, preparador físico y cuerpo médico una vez surtido el procedimiento de ingreso coordinará las actividades a una distancia mínima de dos metros entre ellos, donde cada jugador debe respetar la distancia en cada uno de los procesos. A la hora del entrenamiento, se debe garantizar una distancia de seis metros.
Los jugadores tendrán bajo su cuidado los uniformes completos de entrenamiento dados por el club y será el responsable de su lavado en casa. Por eso, una vez finalice la sesión, el jugador retornará a casa toda la ropa e implementos que llevó en su maletín para el entrenamiento y será su responsabilidad el lavado y desinfección de la ropa.
Durante la sesión de entrenamiento, se establecerán espacios de hidratación, pero cada jugador, dentro del maletín de indumentaria, debe llevar su bebida hidratante y solo él puede consumirla. No se podrá hacer uso de bolsas, vasos o termos compartidos.
“Cada recipiente debe estar debidamente marcado con el nombre del jugador y ubicado a dos metros uno del otro en un sector del terreno previamente delimitado. No debe ser manipulado en ningún momento por persona diferente al jugador, Una vez consumida la bebida, el jugador debe dejar el recipiente para ser desechado”, dice el protocolo.
Si se van a usar colchonetas durante la sesión, requiere que el utilero las disponga en el sector asignado guardando el distanciamiento de tres metros. Estas deben estar previamente desinfectadas para cada sesión de trabajo.
Los jugadores deben realizar el estiramiento individualmente guido por un miembro del cuerpo técnico encargado y no se podrán hacer estiramientos asistidos. Una vez termine el uso de las colchonetas, cada jugador debe realizar su limpieza con las soluciones desinfectantes y luego las dispondrán en un lugar para ser retiradas y almacenadas.
La retroalimentación después de los entrenamientos se debe hacer a través de videoconferencia y los clubes no podrán habilitar la zona de vestuarios, salvo para hacer uso de los baños.
Al finalizar, el utilero debe recoger todo el material utilizado y depositarlo en un contenedor, para que el servicio de aseo realice el proceso de limpieza y desinfección.
Requisitos para todos
– Someterse al control diario de salud
– Dirigirse a la cabina de control de salud antes de dirigirse a otro sector.
– Establecer un horario de llegada de deportistas, entrenadores y personal de apoyo, para evitar aglomeraciones, especialmente, en el punto de control de salud. Los jugadores y cuerpo técnico distribuyen los momentos de llegada cada 15 minutos, Esto permite realizar el control interno diario, la encuesta epidemiológica y las pruebas serológicas cuando correspondan.
– Los artículos personales como joyas, relojes, celulares deben ser dejados en el carro o bus.
– Deben ingresar con la maleta abierta y dirigirse posteriormente a la zona de trabajo. Las puertas de ingreso en la medida de los posible deben permanecer abiertas para evitar el contacto con las manijas.