IBAGUÉ. Las autoridades investigan el homicidio de un funcionario del Inpec ocurrido cerca a la Cárcel de Picaleña. Al parecer, el sicario lo confundió con un interno que salió de permiso, aunque algunos compañeros temen que se trate del ‘Plan Pistola’ del Clan del Golfo.
Historia. Ayer en la mañana varios disparos escucharon los habitantes del barrio Picaleñita y los estudiantes del Centro de Industria y de la Construcción del Sena.
Cuando verificaron lo sucedido, observaron a un hombre sin vida con la cabeza llena de sangre y quien vestía jean, camisa blanca, un bolso negro a sus espaldas y llevaba un sobre de manila en la mano izquierda .
Se trataba de César Augusto Leguízamo Frankis, un dragoneante del Inpec que salió de trabajar de la Cárcel de Picaleña e iba para su vivienda en en el barrio Las Vegas.
Leguízamo Frankis terminó sus labores en la oficina de armerillo pues era el encargado de suministrar las armas a los guardias para las remisiones. Se fue del centro penitenciario y cuando iba por un camino a esperar la buseta fue atacado por un sujeto, que accionó un revólver tres veces en su cabeza sin mediar palabra y luego escapó.
Inmediatamente los guardianes que estaban a una cuadra se acercaron y se dieron cuenta que era su compañero.
Una mujer prestó una cobija para tapar su cuerpo mientras llegaba la móvil de criminalística.
Levantamiento. El dolor y asombro se apoderaron de los colegas de Leguízamo Frankis, quienes detrás de la cinta amarilla acompañaron a las autoridades a realizar el levantamiento del cadáver.
En medio de lágrimas lo recordaron como un excelente trabajador y un gran amigo, y se preguntaron ¿por qué lo asesinaron?
La sijín realizó los actos urgentes y trasladó el cuerpo del dragoneante del Inpec a Medicina Legal.
En su cabeza quedaron los cuatro orificios, tres de entrada y uno de salida.
Hipótesis. En primera instancia el crimen fue relacionado como un posible ‘Plan Pistola’, según lo señaló Alejandro Durán, líder del sindicato del Inpec: “Nuestra labor es de mayor riesgo, trabajamos con la delincuencia y ellos tienen mucho poder. El caso es materia de investigación, no conocemos que el compañero tuviera amenazas, pero sí conocemos por inteligencia del Inpec y la Policía que estamos incluidos dentro del ‘Plan Pistola’ por parte del Clan del Golfo, que ha atentado contra compañeros en Antioquia, contra las remisiones en su desplazamiento y posiblemente esté entrando al Tolima”, señaló Durán.
Sin embargo, la otra hipótesis que manejan las autoridades es que el ‘gatillero’ se confundió de víctima.
Al parecer, el sicario iba a asesinar a Jorge Eliécer Rojas Vargas, un interno del Coiba que sería el segundo al mando de uno de los patios y quien salió de permiso por 72 horas.
Al salir dos carros esperaban afuera al preso y su abogado presuntamente informó que éste corría riesgo porque tenía amenazas de muerte.