IBAGUÉ. El reconocido artista fue encontrado tirado en un pasillo que comunica la sala con las habitaciones del apartamento ubicado en el tercer piso de la calle 10 No 6-28 donde vivió los últimos 14 años.
“Estaba con los pies amarrados y algo enredado en el cuello que parecían unos cables de teléfono o televisión, también unos trapos o sábanas. Tenía dos puñaladas en el pecho y otras en el abdomen; estaba boca arriba con la boca abierta”, relató el dueño de un negocio contiguo que pudo observar la escena del crimen cuando llegó la Policía.
La alerta la dio una de las residentes del mismo edificio que alrededor de las 8:45 de la mañana se percató de los gritos de socorro de su vecino y vio a dos hombres bajar hacia la calle cargando unas bolsas.
Los homicidas fueron capturados en la glorieta de El Vergel cuando se desplazaban en un taxi; uno de los sujetos llevaba las manos ensangrentadas y en su poder se les halló un puñal y un computador del occiso.
“Una mujer muy valiente y con un valor civil grandísimo se subió a una moto que pasaba en el momento, siguió al taxi y se comunicó con un conocido de la Sijín al que le dio la placa del carro y le iba informando; de inmediato el muchacho de la Sijín se puso en coordinación con las patrullas del 123 y les iba orientando la ruta hasta la glorieta del Vergel donde fueron capturados”, explicó el coronel Óscar Pinzón.
Las identidades de los homicidas suministradas por el oficial corresponden a Jhon Fredy Méndez Amézquita, de 23 años, y Jhon Edison Alarcón Cruz, de 21 años, quienes confesaron la autoría del crimen ante el Fiscal de conocimiento en presencia de abogados.
Ambos desempleados llegaron temprano al edificio situado cerca al terraplén del parque Centenario y el fotógrafo les abrió la puerta porque conocía al más joven de ellos, y éste le habría pedido al otro sujeto, un soldado retirado residente en Cajamarca, que lo acompañara porque una de las intenciones era atracar al fotógrafo.
Cuando comenzaron a atracarlo el artista se opuso y empezó a gritar, procediendo entonces a amordazarlo para tratar de callarlo. Al parecer, como no encontraron mayores cosas de valor aparte del computador, el soldado retirado precedió a ultimar al artista propinándole cinco heridas con un arma blanca.
Según el coronel Pinzón ninguno de los dos capturados tiene antecedentes penales y aunque el móvil del hurto aparece como la más posible hipótesis, se trata de establecer también si el crimen podría tener alguna relación con la información del computador.
“Dentro de la investigación se pedirá un peritaje para determinar qué tipo de información tenía y podría interesar a alguna persona que haya robado el computador”, concluyó el Jefe de la Sijín.
Luto en el gremio artístico
Arsenio Zambrano Ocampo era oriundo de Rovira y tenía 68 años de edad. Además de ser un destacado fotógrafo, era escritor, folclorólogo y se había desempeñado como Director de Cultura en el municipio de Honda.
En enero de este año se alzó con el primer puesto del concurso de fotografía Cartagena Caribe, con su imagen “Fiesta de la independencia”. Este fue el más reciente reconocimiento obtenido a lo largo de su vida artística.
Zambrano estaba preparando un libro de fotografías sobre los municipios del Tolima y en este propósito había regresado hace pocos días del Parque Natural Nacional de los Nevados, donde estuvo completando el material gráfico para la que consideraba sería su obra mayor.
Este año en la edición número 20 del Salón Tolimense de Fotografía se tenía programada su participación como artista invitado.
El asesinato del connotado fotógrafo causó consternación en Ibagué y fue repudiado por artistas y amigos en la ciudad.
