IBAGUÉ. Un grupo conformado por voluntarios de la Escuela de Rescate y Alta Montaña de la Defensa Civil Colombiana partió ayer en la tarde con rumbo hacia el sector de El Rancho, vía al Nevado del Tolima, con el fin de iniciar hoy en la madrugada el rescate de un cuerpo que fue divisado por turistas en el sector conocido como ‘La Pared del Oído’ del Nevado del Tolima, ubicado a unos 4 mil 900 metros de altura sobre el nivel del mar.
El director de la Defensa Civil Seccional Tolima, mayor Estanislao Caicedo, manifestó que tras una reunión ayer en la mañana con el Comité Local de Prevención y Atención de Desastres, se dieron las directrices para recuperar el cuerpo: “La idea es llegar hasta el punto, bajar el cadáver a 4 mil metros. De ahí es posible que se haga un desplazamiento a caballo o mula hasta Juntas, donde se le entregará a las autoridades del caso para que sigan los protocolos de levantamiento”, afirmó.
Caicedo manifestó que la presunción de que el cuerpo sea de Julio César Rodríguez Forero, desaparecido el 25 de septiembre del año pasado, corresponde a la identificación de unas prendas de vestir por parte de la progenitora del muchacho a través de unas fotografías que tomaron los montañistas el domingo:
“En enero, unos voluntarios estuvieron cerca del área y tomaron fotos de unos elementos; los familiares confirmaron que le pertenecían a él”, puntualizó Caicedo.
Corazonada de madre
Soledad Forero, la mamá de Julio César Rodríguez Forero, cree que el cuerpo encontrado el domingo es el de su hijo, quien practicaba montañismo desde los 17 años de edad con amigos y hermanos: “El trabajó ahora último en un café Internet. Un hermano iba a acompañar al equipo de rescate, pero dijeron de la Fiscalía que no era recomendable. Igual, para el reconocimiento, lo podían hacer cuando lo tuvieran acá”, dijo a Q´HUBO.
Sobre su hijo, indicó que es el tercero de cuatro hermanos, y hace cinco años se radicaron en Bogotá, ya que son oriundos de Ibagué y Julio César, de 22 años de edad, se crió en el barrio San Carlos, Comuna cuatro: “La última vez que hablé con él fue el 25 de septiembre, el día que desapareció. Me dijo que se iba, y que regresaba a los tres o cuatro días. Él había subido ya como tres veces antes”, puntualizó la señora Forero.