IBAGUÉ. Ayer a las 8:00 de la mañana los residentes del barrio Villamarín reportaron a las autoridades el cuerpo sin vida de uno de sus más queridos vecinos.
La historia. Se trató de Jairo Andrés Bernal Callejas, de 67 años de edad, a quien al parecer le dio un infarto. Sus allegados contaron que no lo veían desde el lunes que le llevaron un sancocho y que ayer a primeras horas un inquilino les informó que el difunto estaba en su cama y que no respondía a ningún estímulo.
Las mujeres del sector que querían mucho al abuelito porque les ayudaba con los mandados y era respetuoso fueron hasta la casa y se dieron cuenta que ya no tenía signos vitales.
Al rato llegó el personal del Grupo de Vida Sijín de la Metropolitana para adelantar los actos urgentes.
Amigo de todos. Jairo Andrés Bernal Callejas era pensionado de la Alcaldía y vivía con su perro con el que todos los días a las 5:00 de la mañana caminaba hasta el barrio Santa Ana, después le gustaba llegar a una tienda del sector donde recochaba un rato y si no almorzaba en la casa de un amigo los vecinos le llevaban la comida en un porta.
La familia. Una hermana residente en el barrio Topacio llegó al lugar de los hechos para encargarse del papeleo y honras fúnebres el hombre de la tercera edad.
