IBAGUÉ. El veneno de las abejas mató a José William Avilés quien era alérgico a las picaduras de los insectos.
El hombre llegó a trabajar a la Hacienda El Zorro, localizada entre las glorietas de la Casa de la Moneda y Rodeo, por la Variante, sector de Picaleña.
Avilés estaba limpiando una zona de la hacienda con un bulldozer cuando encontró las abejas.
Al pariente de Avilés le contaron que el patrón de su hermano fue a eso de las 9:30 de la mañana llevarle Acpm para la máquina, pero ya no estaba.
Lo extrañaron y lo buscaron sin tener señal de él, y pidieron ayuda a las autoridades para hacer una inspección más amplia.
El coronel Óscar Antonio Gómez Heredia, comandante de la Policía Metropolitana, manifestó: “El cuerpo de Bomberos atendió la emergencia e inicialmente se pensó que posiblemente se había ahogado en un lago”.
Los socorristas de Bomberos Voluntarios continuaron la búsqueda y luego de cinco horas encontraron el cuerpo de Avilés que estaba en medio de un matorral.
El bulldozer, que era manipulado por Avilés, estaba a varios metros de distancia. Presumen que el maquinista corrió para evitar ser picado por las abejas porque el cuerpo estaba untado de barro.
Posiblemente iba para el lago y no pudo llegar: “Cuando se hace la inspección se observan bastantes picaduras de abejas”, aseguró el coronel Gómez Heredia.
Llevaba poco. El hombre había llegado a trabajar a la hacienda hacía 10 días. Él siempre había laborado con el Comité de Cafeteros en diferentes partes.
La familia. Avilés vivía con su esposa y cuatro hijos en el barrio Calucaima, sector de El Salado.
Tenga cuidado.Si usted es alérgico a la picadura de abejas, avispas comunes o avispas amarillas, es importante que lleve siempre consigo un equipo contra picaduras de abejas (el cual requiere receta médica) y que se familiarice con la forma de usarlo. El equipo contiene un medicamento, llamado epinefrina, que usted debe tomar inmediatamente si resulta picado por una abeja.
Andrés Páez
