Las balas volvieron a sonar en Ibagué. Esta vez, en el asentamiento Milagro de Dios, en la comuna Nueve, asesinaron mediante la modalidad de sicariato a una mujer.
El hecho ocurrió sobre el mediodía de este sábado 20 de marzo.
La víctima fue Yadira Bonilla Espinel, de 36 años, y quien conducía una camioneta blanca en la que vendía pescado.
Al momento del ataque, Yadira iba en compañía de otra mujer, que le entregaba el pescado a los clientes, mientras ella maniobraba el vehículo.
El padre lo entregó
El secretario de Gobierno municipal, Carlos Portela, confirmó que el presunto asesino fue un menor de 17 años, residente en el sector, que fue entregado por su propio padre a las autoridades.
Testigos del hecho le aseguraron a Q’HUBO que el muchacho, que vestía camiseta blanca y pantaloneta gris y que sería el hijo de un prestamista del asentamiento, abordó a la víctima y sin pensarlo dos veces le propinó tres disparos, la mayoría en la cabeza.
Luego de haber cumplido su objetivo, el joven habría seguido caminando hacia su casa, como si nada.
Residentes del sector y la otra mujer le prestaron los primeros auxilios a la señora y de manera inmediata la trasladaron al Hospital Federico Lleras Acosta, donde llegó sin signos vitales.
La Policía llegó al asentamiento, ubicado a pocas cuadras de la Cárcel de Picaleña y efectuó un ‘plan candado’ con la intención de dar con el paradero del responsable, pero sorpresivamente el prestamista entregó al muchacho.
No se descarta que el crimen esté relacionado con temas pasionales..
La víctima
De Yadira Bonilla Espinel se supo que era madre de dos niñas y compañera sentimental de un hombre que se encuentra recluido en el Coiba de Picaleña.
Personas cercanas la describieron como una mujer amable, noble y muy trabajadora.
