IBAGUÉ. Las autoridades están tras la pista de los asesinos de Pedro José Ruiz Castro, hermano del magistrado José Aleth, presidente de la Sala del Tribunal Administrativo del Tolima. Los principales sospechosos del homicidio serían unos inquilinos de nacionalidad venezolana. Ayer se llevaron a cabo las exequias del comerciante.
Historia. A la iglesia San Lorenzo del barrio Ciudadela Simón Bolívar ‘no le cabía ni un grano de arroz’. Los vecinos de don Pedro se postraron a la entrada de la casa de Dios mientras llegaba el féretro con sus restos mortales.
A lo lejos se escucharon los pitos de motos y carros que acompañaron al coche fúnebre desde la funeraria Comfunser hasta la parroquia.
En esos momentos, las campanas dieron el último toque y sonó la canción cristiana ‘Más allá del sol’.
Las lágrimas no se hicieron esperar entre los asistentes a la eucaristía. Aún los habitantes de este barrio de la comuna Ocho de Ibagué no salen del asombro por el vil asesinato y se preguntan: “¿Por qué lo mataron?, ¿Si lo iban a robar, por qué no lo dejaron vivir, solo lo hubieran amarrado? ¿Por qué le hicieron eso a ‘Pedrito’?
Una vez terminó la misa, los restos mortales de Ruiz Castro fueron trasladados hasta el Cementerio San Bonifacio donde fueron sepultados.
Tras la pista. A través de las redes sociales han circulado las fotografías de un par de mujeres y un hombre que serían venezolanos. La publicación está acompañada del siguiente mensaje: “Se ganan la confianza de las personas que viven solas y luego las asesinan, así le pasó a mi amigo Pedro”. Además incitan a que sea compartido para que los logren identificar y hasta han ofrecido recompensa para su ubicación. A quienes aparecen en las fotos los señalan de ser los responsables de la muerte de Ruiz Castro; sin embargo, las autoridades serán las encargadas de determinar si en realidad son los homicidas.
Los venezolanos. El rumor que corre por la Ciudadela, es que días atrás don Pedro les arrendó a los ‘chamos’ un apartamento donde tenía la venta de licores 24 horas ubicada en la casa 23 de la manzana cinco de la Primera etapa y que el pasado viernes, cerró el local hacia las 11 p.m.
Al parecer, las venezolanas estaban tomando en el lugar. Sobre las 2 de la madrugada, ‘Cocoliso’ (conocido del barrio) lo habría encontrado bocabajo y sin vida en el negocio, luego de que las puertas estaban entre abiertas.
Y desde ese día los venezolanos se habrían esfumado.
Homenaje. Los habitantes de la Ciudadela exigieron a la justicia esclarecer el hecho. Quienes no asistieron a la velación, se reunieron el domingo en la noche frente a la casa de don ‘Pedrito’ y prendieron veladoras en su honor.