IBAGUÉ. El concierto ‘beber, beber y beber’, que pintaba como uno de los eventos más esperados de mayo, terminó con tremendo espectáculo pero no precisamente desde el punto de vista musical, sino por los desmanes que ocasionaron algunos asistentes que ‘enardecidos’ por el incumplimiento con la nómina de artistas lanzaron toda clase de elementos a la tarima.
Desmanes. El recital fue promocionado como un homenaje a las madres de Ibagué, ya que se programó para el primer fin de semana de mayo, y contaba con una lista de reconocidos artistas de música popular.
Uno a uno desfilaron Jimmy Gutiérrez, Darío Gómez, Fernando Burbano y Luis Alberto Posada por la tarima del coliseo del colegio Champagnat para cantar su repertorio.
Sobre la medianoche la organización anunció que Pipe Bueno y Alzate, cantantes restantes, no se presentarían en el recinto, lo que generó la indignación colectiva de la comunidad que se armó de lo que tenía a la mano y lo arrojó al frente del escenario a manera de protesta.
Por el aire volaron sillas, mesas, botellas y vallas de contención. La situación se salió de control y fue necesaria la presencia de las autoridades para evacuar al público inconforme porque el organizador no cumplió con los artistas que prometió, además que aparentemente la ingesta de licor fue un componente de la reacción agresiva.
“Se evacuó a una persona por la ambulancia de bomberos, porque al parecer se resbaló y presentó una dificultad en uno de sus hombros, por lo que fue trasladada a urgencias del hospital Federico Lleras”, indicó Giomar Troncoso, directora del Gpad.
Consecuencias. Hugo Ernesto Zarrate, secretario de gobierno municipal, rechazó de forma vehemente los hechos ocurridos al final del concierto y anunció que al empresario se le abrirá un proceso para una sanción económica, cuyo monto podría ascender a los 250 millones de pesos afirmó el funcionario.
Habló la Rectora
La rectora de colegio Champagnat, Janneth Galindo Lozano, le indicó a esta redacción que la institución no tuvo nada que ver con la organización del evento, toda vez que firmó un contrato de arrendamiento con el empresario Luis Antonio Poveda Morales.
“Nos reunimos con Luis Ernesto Zarrate, secretario de gobierno, pues realmente fuimos asaltados en nuestra buena fe, porque no es un secreto que desde hace tiempo el colegio arrienda el coliseo para eventos y nunca se había presentado una situación como la del domingo en la noche”, señaló la rectora.
A raíz de los incidentes las directivas estarían analizando y replanteando las condiciones para volver a arrendar el coliseo de la institución.
“Hubo perjuicios mínimos. Los daños los sufrieron los organizadores del evento, porque más allá de no tener las condiciones de aseo óptimo en el coliseo, no fue nada para lamentar”, finalizó Galindo Lozano.
No se iba a presentar
El sábado se prendieron las alarmas, toda vez que Luis Alberto Posada anunció que no viajaría a Ibague porque el empresario incumplió los términos del contrato. Sin embargo a escasas horas del concierto, se retractó con otro video y confirmó su asistencia.
“Otra vez los molesto con este cuento tan bochornoso de empresarios. Al fin pudimos acordar lo pactado para cantarles mis canciones, esperando que se cumpla el compromiso. Allá nos vemos Ibagué”, dijo el cantante.
Se disculpó con sus fans
El domingo en la noche Pipe Bueno a través de su cuenta de Instagram mostró su malestar ante el incumplimiento con los términos de su presentación y anunció que no haría parte de ‘beber, beber y beber’.
“Estoy muy sorprendido en cuanto al tema de los empresarios. Ayer (sábado) Luis Alberto Posada ‘montó’ un video porque el empresario ‘Nacho’ Reyes no le había cumplido el contrato. Pero finalmente le cancelaron a toda la nómina de artistas y a mí no. Estoy en Ibagué pero no me voy a presentar. Lo siento fanáticos, madres, ‘parceros’ y mamasitas. Son un público excelente al que no quiero defraudar, vine con mucho cariño pero no me cumplieron con el contrato”, señaló el artista.
