Andrés Aldana, encargado de efectuar las compras para un restaurante de Ibagué, quedó frío este jueves por la mañana cuando el conductor del taxi al que subió las bolsas no lo esperó y arrancó.
En diálogo con Q´HUBO el hombre contó que él le hizo el pare al ‘amarillo’ en la Plaza de la 21 y le dijo al taxista que lo esperara un momento mientras él compraba unas papayas. “Cuando volví ya no estaba. Yo iba en moto y la intención era guiarlo hasta el restaurante. Fue como un baldado de agua fría porque el mercado era de un millón de pesos”, dijo.
Al cierre de esta edición, el ciudadano con ayuda de la Policía observaba las grabaciones de las cámaras de seguridad del sector con la esperanza de identificar el vehículo.
