Alison Hinestroza es una mujer oriunda de Buenaventura en el Valle del Cauca, desplazada por la violencia y vendedora informal, quien a pesar de su situación no deja solas a sus tres hijas a quienes en medio de su trabajo, en las calles del Centro de ‘La Musical’ sobre las sillas de cemento, las motiva para que hagan sus tareas y continúen con su estudio.
Esta mujer de 37 años de edad, habló con Q’HUBO y contó que llegó desplazada por la violencia desde Neiva, Huila. Y desea que sus hijas no dejen de aprender, así que sale de la vivienda en el barrio Baltazar donde reside y las lleva todo el día junto a ella incentivándolas a que continúen aprendiendo.
Busca datos
Alison aseguró que por sus propios medios consiguió el equipo tecnológico, una tableta con la cual, cuando consigue el dinero para los datos para conexión, sus hijas de nueve, siete y cinco años de edad, ingresan a las clases.
Si no pueden, cuando no tiene la conexión, consigue las tareas que deben realizar y agradece a las profesoras de la Institución Educativa Mariano Melendro, que les dan espera para que entreguen sus tareas.
“Me han tenido paciencia, me dicen no, no se preocupen que apenas usted pueda me envía las tareas”, contó Alison mirando la tableta y los diferentes grupos de whatsapp donde los docentes de sus hijas les dejan los trabajos a realizar.
Las niñas de siete y nueve años de edad, cursan primero de primaria, y la más pequeña de cinco años está en pre escolar y está aprendiendo las vocales.
Las ayudas
Esta madre recordó que: “Hemos pedido ayuda al Estado para el estudio de ellas y no ha sido posible, pero en nombre de Dios he salido y he conseguido para el estudio de ellas. Así que me las traigo porque no tengo con quién dejarlas, quién me las cuide, y ahí les voy enseñando y adelantando en sus tareas”.
Aseguró Alison que cada vez que salen los profesores de Simatol a protestar les colaboran a sus hijas con las tareas, se las revisan y las motivan a seguir estudiando, así lo hicieron ayer mientras permanecían los docentes en un plantón frente a la Alcaldía de Ibagué.
Las pequeñas hacían sus tareas en la banca y se las mostraban a los docentes que estaban protestando, quienes con cariño les corregían, y miraban su interés.
incluso reveló Alisón: “Hace dos o tres meses durante una reunión de Simatol, ellos me bendijeron con un mercadito para mis hijas”, refirió la mujer.
Y agregó que estaba de acuerdo con la protesta de los profesores y desea que sus hijas puedan volver al colegio en alternancia en óptimas condiciones para todos.
Tome nota
Si usted desea contactar a Alison y colaborarle puede llamarla al celular: 3126429132