La Constructora Colpatria, que tiene a cargo la adecuación de varios megacolegios en Ibagué, al parecer, no solo tiene inconvenientes con algunos contratistas en la institución educativa Carlos Lleras Restrepo, también los tendría con otras empresas en el colegio Celmira Huertas, de la séptima etapa del barrio Jordán.
Otro bloqueo
Este martes 23 de marzo, más de 15 trabajadores de las obras en el Celmira Huertas, bloquearon la entrada al lugar, pues aseguran que la entidad Ecconsa S.A.S. completó dos meses sin pagarles.
Una de las afectadas es Briyith Caviedes, una de las pocas mujeres que trabaja en la obra. Ella, una madre cabeza de familia y quien se dedica a cortar ladrillos, lleva tres meses laborando allí y asegura que solo ha recibido el pago de un mes.
“Es una situación muy dura, tengo una niña y como le debo plata a la señora que me la cuida, estos días me ha tocado traerla conmigo. Colpatria dice que la culpa es de Ecconsa y Ecconsa asegura que está esperando un desembolso de Colpatria. Tengo un montón de deudas encima y estoy muy preocupada”, aseguró la dama.
Según el testimonio de los trabajadores, la mayoría maestros de construcción, Ecconsa trajó personas de Bogotá, pero ante la falta de pago, a muchos les ha tocado regresar a la Capital de la República.
“Es bien complicado. Estos obreros tuvieron que pagar arriendo y alimentación y no les pagaron. Nosotros, por su parte, tenemos familia, hijos y gastos que no dan espera. En pocas palabras, un ingeniero de Colpatria nos dijo que hiciéramos lo que quisiéramos. Que ellos esperaban el proceso jurídico”, señaló un obrero, que prefirió reservar su identidad.
Caso Carlos Lleras
Es de recordar, que la semana anterior más de 20 trabajadores del megacolegio Carlos Lleras Restrepo, ubicado en el barrio El Salado, también bloquearon el ingreso a la obra, pues según ellos, el representante legal de D.J Construcciones, una empresa Bogotana, se habría fugado con 80 millones de pesos, dinero que Colpatria le habría consignado.
Tome nota
Q’HUBO intentó dialogar con el ingeniero encargado de la obra para conocer la versión de la compañía frente al tema, pero el profesional aseguró que no estaba autorizado para dar declaraciones.
Cifra: 2 millones de pesos, en promedio, le debe el contratista a cada trabajador.