El Juzgado 13 Penal Municipal con Funciones de Conocimiento, precluyó el proceso en la cual era señalado Juan Bernardo Mejía Flomin por los delitos de lesiones personales.
El administrador de justicia aceptó los argumentos de la Fiscalía, en los cuales se planteó que Juan Bernardo fue la víctima real de los hechos que desencadenaron en las gravísimas lesiones que lo dejaron en estado vegetativo y no cómo lo había denunciado César Alejandro Troncoso Camacho, uno de los agresores del joven.
El caso
Por este caso fueron procesadas dos personas. César Alejandro Troncoso Camacho, condenado a 84 meses de prisión (siete años), y a quien le fue concedida la detención domiciliaria por el delito de lesiones personales con deformidad permanente, lo que rebajó la condena, además porque pagó una indemnización de 100 millones de pesos. En febrero de 2020 la prisión domiciliaria le fue revocada debido al incumplimiento de Troncoso Camacho, pues adjuntaron unos informes de la universidad donde estudiaba. En la actualidad paga su condena en prisión.
Por su parte, Mario Alejandro Troncoso Troncoso, primo de César Alejandro, fue condenado a tres años, 11 meses y cuatro días de prisión. Luego del revuelo que generó una emisión del programa de televisión Séptimo Día, que mostró detalles del caso, ambos procesos fueron revisados.
A Mario Alejandro le fue revocado el subrogado de la suspensión condicional de la ejecución de la pena y emitieron una orden de captura en su contra. Según el despacho, Troncoso Troncoso no había asistido a diligencias programadas por el Juzgado Segundo Penal del Circuito, ante el cual se adelanta el trámite de reparación integral solicitado por el abogado de la víctima.
La golpiza
Ocurrió hacia las 5 de la madrugada del 26 de octubre de 2014, en el Rancho San Miguel, un establecimiento ubicado en la vía al aeropuerto Perales. Juan Bernardo, al parecer, ingresó al baño de mujeres donde estaban unas amigas de Troncoso y su primo Mario, y esto suscitó una pelea. Troncoso Camacho junto con otro hombre y su primo, golpearon brutalmente a Juan Bernardo. El primero le dio con un palo de escoba y su pariente le pegó con un ladrillo en la cabeza. A raíz de los fuertes golpes, el joven chef ingresó a la UCI de la clínica Los Nogales y quedó en estado vegetativo.
Tome nota
La preclusión permite la terminación del proceso penal sin agotar todas las etapas procesales, ante la ausencia de mérito para sostener una acusación.
