Película escrita y realizada por un tolimense en Cartagena busca conquistar festivales de cine

“Por un toque” se grabó en Cartagena, con actores naturales. Foto: suministrada.

Yerson Vargas Galeano lleva con orgullo su identidad tolimense, y cuenta que siempre se ha caracterizado por el empeño y la dedicación para perseguir sus sueños. Desde niño, se sintió inclinado hacia el arte y cuando se le presentaron las oportunidades, no dudó en aprovecharlas. Ese recorrido lo llevó a ser el cerebro detrás de la película “Por un toque”, producción filmada en Cartagena, con la que espera conquistar festivales internacionales.

Todo empezó con un sueño

En 2009, Yerson trabajaba como vigilante en Bogotá, cuando un primo suyo le aconsejó estudiar arte dramático. El joven siguió el consejo y pasó por tres reconocidas academias, entre ellas Proyecto K, de la reconocida actriz Ana María Kamper. Posteriormente, obtuvo personajes en series como “Corazones Blindados” y “Bloque de Búsqueda”, lo que lo llevó a conocer a personas del medio y a motivarse a seguir su carrera en el arte. 

“Jorge Perea, de Teso Films, una productora de Melgar, me propuso hacer cortos y escribir guiones, formamos equipo e intentamos hacer una película, que está pendiente. Fui aprendiendo empíricamente, hasta que pude tomar un curso de guion y seguir preparándome como actor”, relata Yerson, quien además ha incursionado en la literatura, ganando convocatorias a nivel nacional e internacional, con textos como “Armario de Letras”, antología de cuentos que obtuvo un premio en Nuevo León, México.

Yerson Vargas es oriundo de Melgar. Foto: Instagram.

La película

El realizador se radicó en Cartagena por temas familiares y allí conoció a los integrantes de la Corporación Ángeles de Calle, que trabaja con jóvenes afectados por la drogadicción, madres cabezas de hogar y adultos mayores. De experiencias relatadas por ellos, surgió la idea de “Por un toque”, cuyo guion escribió en pocos meses. “La historia es sobre un joven que se sumerge en las drogas por un entorno problemático. El enfoque es reflexivo, desde una óptica cristiana”, asegura Yerson. 

Las grabaciones iniciaron hace casi un año. La pre producción se hizo en los primeros meses de 2020 y en marzo, justo antes del aislamiento, habían empezado a rodar. Debido a las restricciones de bioseguridad, en los siguientes meses se realizaron las escenas en interiores, y para septiembre, cuando se levantaron algunas medidas restrictivas, se filmó el resto del material en exteriores. Ahora, los realizadores de la cinta, cuyo elenco está conformado por actores naturales, esperan participar en el Festival de Cine de Cartagena.

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