Según Asofondos, las cesantías han sido el mecanismo más idóneo al que han tenido que recurrir los trabajadores colombianos para enfrentar los efectos de la pandemia del Covid-19.
“Más de millón y medio de trabajadores, cuyos ahorros están en los fondos de pensiones y cesantías, lograron afrontar la pérdida de empleo o caída de ingresos en 2020, gracias al uso de más de $2,6 billones. De hecho, terminación de contrato fue el único rubro que mostró crecimiento en un 7%, con respecto a 2019”, explicó Santiago Montenegro Trujillo, presidente de Asofondos.
Montenegro aseguró que las cesantías “son un ahorro de y para el trabajador, óptimo para afrontar contingencias laborales como las observadas a raíz de la pandemia”.
Los recursos utilizados por más de un millón y medio de trabajadores afiliados a las cuatro empresas administradoras (Colfondos, Porvenir, Protección y Skandia), bajo la causal de terminación de contrato, superaron los $2,2 billones.
Su utilización para afrontar una “caída de ingresos”, autorizada desde el año pasado por el gobierno nacional, en medio de la coyuntura de pandemia, también mostró resultados muy significativos.
Este uso, aún vigente, superó los $355,821 millones, al cierre de 2020.
De acuerdo con cifras de la Vicepresidencia de Estudios Económicos de Asofondos, en la última década, las cesantías han mostrado que son un mecanismo óptimo para que los trabajadores afronten la pérdida de empleo, toda vez que los retiros bajo esta causal superan los $15 billones.
Las cesantías las reciben, en su mayoría, trabajadores que devengan entre 1 y 2 salarios mínimos legales. En particular, Colfondos, Porvenir, Protección, y Skandia, administran el ahorro de más de ocho millones y medio de personas, cuyos recursos ascienden a $14,7 billones.
En 2020, los trabajadores retiraron un total superior a los $6,2 billones. Este año los empleadores deben consignar las cesantías de sus empleados hasta fecha límite del 15 de febrero.
