Las elecciones presidenciales de los Estados Unidos han tenido un ‘efecto cascada’ en el panorama electoral colombiano y han vuelto a poner sobre la mesa las posibilidades de algunos candidatos prematuros de cara a las votaciones de 2022, pese a que aún falta un largo camino. Sin duda, las posibilidades del excandidato y hoy senador Gustavo Petro, han vuelto a estar en el debate.
Petro, quien sacó un poco más de 8 millones de votos en las pasadas elecciones presidenciales cuando se enfrentó a Iván Duque, pese a que apunta a ser uno de las grandes figuras en el próximo escenario electoral, no parece terminar de convencer a las demás fuerzas de centro–izquierda, quienes se rehúsan, por ahora, a buscar una alianza con él para que los lleve a la Casa de Nariño.
Y es que en medio de lo que muchos predicen como una jornada electoral bastante apretada por el contexto político en el país, así como por la crisis que ha desatado la pandemia del Covid-19, las cartas que se han mostrado, han tratado de inclinarse un poco más hacia el centro, bien sea de izquierda o derecha.
Uno de los que parece más alejado a la posibilidad de aliarse con Petro es el senador Jorge Enrique Robledo, quien hace poco se separó del Polo Democrático y pasó a liderar el nuevo movimiento político ‘Dignidad’. Este último hecho generó enfrentamientos entre ambos, lo que al parecer produjo más distancia.
Pero a este panorama se suma el hecho de que en las elecciones estadounidenses haya ganado una pareja presidencial catalogada de tener una postura más de centro, lejos de los extremos, pese a que el presidente Donald Trump, quien buscaba la reelección, acusó al ahora mandatario electo Joe Biden de estar aliado con Gustavo Petro. Analistas coinciden en que lo que ocurrió en la jornada democrática del país norteamericano influirá en la región.
Carlos Medina, profesor de ciencias política de la Universidad Nacional, señala en este sentido que Gustavo Petro ha sido ubicado en un lugar de polarización que no le corresponde, porque no representa los elementos que se le quieren atribuir, tales como el castrochavismo, el comunismo o el socialismo, sin embargo, reconoce que haber hecho parte del M19 lo perfila como una figura instrumentalizante.
Es quizá la misma razón por la que Sergio Fajardo e, incluso, Iván Marulanda se han negado a construir una coalición con el senador y líder la Colombia Humana, pero para el analista político, Jorge Iván Cuervo, este problema no tiene que ver solo con Gustavo Petro sino con los extremos. Por esta razón, señala que el escenario podría ser similar para el que sea elegido como representante de la derecha en las próximas elecciones.
Una de las propuestas que más ha tenido cabida en el escenario político ha sido la del excandidato presidencial Humberto de la Calle, quien propuso hacer una gran coalición nacional de centro que incluyera a al centro–izquierda y a la centro-derecha, para superar los extremos en los que se ha dividido el país durante los últimos años.
Sin embargo, la mayoría de representantes no estarían dispuestos a enfrentarse con el senador Gustavo Petro por las mismas razones por las que alguno se negaron a hacerlo en las pasadas elecciones, en especial, porque lo consideran más inclinado hacia la izquierda, que está relacionada con Nicolás Maduro y con la situación de Venezuela.
Carlos Medina añade que este panorama se ha generado porque se ha fomentado un proceso de polarización entre el uribismo y el candidato Gustavo Petro, porque el Centro Democrático y el presidente Iván Duque necesitan una figura con la cual polarizar para mantener la actitud electoral de la intensión del voto ciudadano en el país.
Otro de los factores que según el analista impide que el senador de la Colombia Humana forme alianzas con otras fuerzas políticas está relacionado con la eventual negativa de estos a sumir que Petro les gane en las consultas internas y pasar a apoyarlo. “Entonces mientras Gustavo Petro está dispuesto a construir con las colectividades políticas que estén dispuestas, los demás partidos no se le miden, porque frente al respaldo que pueda tener la Colombia Humana, no tendrían opción”.
Sin embargo, Medina indica que en este momento están muy tempranas las apuestas políticas para poder definir un candidato que pueda recoger colectividades que se vayan a oponer electoralmente al actual Gobierno o a la decisión que tenga el partido del Centro Democrático de poner un candidato para la Presidencia de la República.
En este sentido, la analista política Bibiana Clavijo señala que esta es la fase inicial de las candidaturas políticas y, en consecuencia, lo que se está haciendo ahora es medir las distintas fuerzas de manera independiente para empezar a analizar las posibilidades de cara a la opinión pública. Indica que después de esta etapa se empezarán a configurar alianzas, sin embrago, para esto todavía falta mucho tiempo.
“La opinión pública es volátil, además, estamos en un escenario que no se nos había presentado. Habrá que ver qué pasará con las vacunas, con decisiones de salud pública, cuáles van a ser las repercusiones de orden económico que va a traer este año el país. Todos estos elementos van a determinar cuáles son las candidaturas que están punteando, cuáles son las que más dificultades van a tener para sobresalir en la opinión pública”, añade Clavijo.
Jorge Iván Cuervo destaca que es importante lo que han arrojado los últimos sondeos de opinión, que reflejan que pese a que hay un gran porcentaje de ciudadanos que se identifican con el Centro Democrático o con la Colombia Humana, la mayoría se considera de centro, lo que significa que mucha gente piensa que la polarización política no es el mejor escenario para elegir presidente en 2022.
Frente a Petro, el analista indica que este tiene un voto fidelizado, así como lo tiene el expresidente Uribe con el Centro Democrático, pero destaca que ninguno de los dos puede ganar solo y recuerda que para Iván Duque ganar la Presidencia tuvo que hacer alianzas.
“Todo indicaría que ninguno de los dos extremos solos, gana. Todo indica que se consolidaría una candidatura de centro que se meterá a segunda vuelta con alguno de los dos, uno pensaría que esa candidatura de centro le podría ganar a cualquiera de los dos”, añade Cuervo.
Sin embargo, advierte el experto que esta candidatura de centro sería difícil de consolidar, porque no es claro cómo es que se va a escoger el candidato de centro o si habrá alguna consulta interpartidista en la que participarían las fuerzas que se identifican con esta postura.
Carlos Medina, por su parte, recuerda que Petro puede aliarse con fuerzas pequeñas como Asís o Maíz, las cuales podrían sumarle votantes con el electorado de las comunidades afrodescendientes e indígenas, pero, sin duda, lo que necesitaría el hoy senador es convocar fuerzas del centro y, sobre todo, ganar aceptación con la masa de ciudadanos inactivos en la política y que no asisten a las urnas.
El analista señala que lo que puede haber es que haya una tendencia a que los partidos tradicionales de derecha y algunos partidos del centro puedan adherirse a una candidatura mayoritaria de la derecha. En esta alianza estarían el Partido Liberal, el Partido de la U y el Centro Democrático.
“El potencial electoral que tenga Gustavo Petro no es un potencial electoral con el cual pueda contar de manera indefinida, es el resultado de una jornada electoral, pero esos no son 8 millones de votos que va a tener en las próximas elecciones. El electorado se mueve de manera muy dinámica durante los procesos electorales y falta ver qué tipo de candidatos buscarán representar el centro o las fuerzas alternativas”, adhiere Medina.