Con un plantón y una regalatón de papa a las afueras del Ministerio de Agricultura en Bogotá, los paperos comenzaron una jornada de manifestación con la que buscan que el Gobierno Nacional atienda la crisis que atraviesa su sector.
En los últimos días, los campesinos y agricultores del país se han visto obligados a vender sus productos en las carreteras, pues una fuerte caída en los precios y la sobreoferta del producto los ha llevado a tomar medidas extremas para intentar vender sus producciones.
Según han denunciado los paperos, mientras antes de la pandemia un bulto de papa podía costar más de 50.000 pesos, hoy solo reciben ofertas de 20.000 pesos o menos, lo que no es suficiente para cubrir los altos costos de producción.
Con las manifestaciones de este viernes, los paperos le piden al Gobierno Nacional que frene las importaciones de papa congelada y revise los tratados de libre comercio, pues todos los productos importados se pueden producir en el país.
Además, piden un programa de compras públicas y soluciones a los bajos precios que enfrentan sus cultivos de papa. Exigen también alivios financieros a las deudas que tienen hoy los productores, deudas que les ha sido imposible pagar debido a los bajos beneficios que obtienen de sus ventas.
Solicitan una mesa de diálogo en la que se revisen los costos de producción y el ordenamiento productivo, además de una campaña que incentive el consumo de papa a nivel nacional.
Las protestas no se viven solamente en la ciudad de Bogotá, los paperos se concentran desde temprano en otros puntos de Ipiales, Cauca, San Gil, Boyacá, Pasto, Caldas y Antioquia.
Además, este fin de semana, los paperos venderán sus producciones en distintos peajes del departamento de Cundinamarca, acompañados y apoyados por la Gobernación. También habrá una Papatón en la ciudad de Bogotá para que estos puedan vender sin necesidad de intermediarios y así obtener mayores beneficios de sus cosechas.
“Si el gobierno no reacciona positivamente, vamos a tener que hacer más movilizaciones en los próximos días”, afirmó Oscar Gutiérrez, director ejecutivo de Dignidad Agropecuaria.