El irlandés Sam Bennett (Deceuninck) ganó al esprint este viernes la 4ª etapa de la Vuelta a España entre Garray y Ejea de los Caballeros, tras la que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) sigue líder de la general.
Bennett sorprendió prácticamente sobre la línea de meta al belga Jasper Philipsen (UAE), que fue segundo, y al italiano de origen polaco Jakub Mareczko (CCC), tercero.
Tras tres primeras etapas marcadas por la montaña, esta cuarta etapa de transición de 191 km antes de retomar el camino de las alturas el sábado, estaba prevista para los velocistas y Bennett no perdió la oportunidad de apuntarse su tercera victoria en la ronda española.
La carrera se vio marcada por la escapada de los españoles Jesús Ezquerra (Burgos-BH) y Luis Ángel Maté (Cofidis) el sudafricano Will Smit (Burgos-BH) y el británico Harry Tanfield (AG2R), que fueron neutralizados por el gran grupo a una quincena de kilómetros del final.
los hombres del Deceuninck tomaron el control del pelotón a dos kilómetros de meta para colocar bien a su hombre.
Philipsen saltó a menos de un kilómtro para la meta, yendo tras él Bennett, quien logró superarlo prácticamente sobre la línea.
«Tenía la fuerza, pero cuando saltó (Philipsen) fue tan explosivo que no sabía si lo alcanzaría», confesó Bennett tras la carrera.
Roglic, otro día de rojo
Los favoritos de la general entraron sin problemas por detrás, sin que la clasificación haya sufrido cambios.
El esloveno Primoz Roglic mantuvo un día más el liderato, aventajando en 5 segundos al irlandés Daniel Martin (Israel) y en 13 al ecuatoriano Richard Carapaz (Ineos).
«Otro día de rojo», dijo Roglic, tras la carrera, agradeciendo el trabajo de su equipo «que me protegió en todo momento» en una jornada en la que «aparecieron los nervios en algunos puntos, especialmente en los últimos 20 kms, que fueron súper rápidos y dio un poco de miedo».
«Ha sido un día muy nervioso, primero con el aire y luego la etapa que fue tan rápida», comentó también Carapaz tras la carrera.
«Pero, creo que estamos muy bien, el equipo está muy contento con el rendimiento», añadió el ciclista ecuatoriano.
«No ha sido una etapa tranquila porque se ha ido muy deprisa todo el día, pero la hemos salvado bien y estamos contentos», dijo el ciclista del Movistar, Enric Mas, cuarto en la general a 32 segundos del líder.
El sábado tendrá lugar la 5ª etapa de la Vuelta a España, de 184,4 km, entre Huesca y Sabiñánigo con dos altos de tercera categoría y uno de segunda, antes de la 6ª etapa del domingo, que finalizará en la estación de esquí de Formigal.
La Vuelta se vio obligada a cambiar el recorrido de esa sexta etapa, cuyo final estaba previsto inicialmente en el alto del Tourmalet, al no poder entrar en Francia por las restricciones impuestas para luchar contra la pandemia.
«Es una pena lo del Tourmalet, pero sigue siendo una etapa muy fuerte, entonces, a esperar a ver qué sorpresa nos trae», advirtió Carapaz.