En un taxi y proveniente de Caldas habría llegado a Ibagué un joven de 16 años de edad que fue capturado en Llanitos, vía al Cañón del Combeima, señalado de cometer un atroz crimen contra un joven estudiante de mecánica automotriz del Sena.
Muerte sin piedad
En un kiosco ubicado en los terrenos de la finca La Floresta, a una hora y media de Llanitos, en el Cañón del Combeima, fue hallado con múltiples heridas de arma blanca un joven de 20 años de edad, quien vivía con su papá y hermana menor en el barrio Boquerón de Ibagué.
Con el apoyo de los trabajadores de la finca, el papá de la víctima encontró el cadáver de su hijo cerca de la cascada, con puñaladas en el rostro, en el cuello, en la espalda y otras partes del cuerpo. De otra parte, el presunto agresor fue aprehendido por los uniformados adscritos al cuadrante de Llanitos y después dejado a disposición de las autoridades de infancia y adolescencia por el delito de homicidio agravado.
Sin rastro de Miguel
Miguel Joas Roa Amaya, un apasionado por las motocicletas y la velocidad, perdió la vida en medio de un vil ataque perpetrado lejos del casco urbano de Ibagué. El joven estudiante del Sena habría salido de su vivienda el martes en la tarde para supuestamente encontrarse con su pareja sentimental. Sin embargo, su papá y hermanita le perdieron el rastro hasta el miércoles en la tarde que recibieron la noticia sobre su deceso.
CIFRA:
20 años de edad tenía el joven asesinado en Llanitos. El mes pasado celebró su último cumpleaños.
TOME NOTA:
El cuerpo de Miguel Joas fue trasladado hacia las instalaciones de Medicina Legal, donde los médicos forenses le practicarán los exámenes que servirán con material probatorio para esclarecer el crimen cometido en una caseta donde almuerzan los trabajadores de la finca La Floresta. Mientras tanto, la Fiscalía avanza en la judicialización del adolescente capturado.