IBAGUÉ. Un profundo sentimiento de tristeza embarga a los integrantes de la fundación La Nueva Esperanza luego de que se conociera el deceso del señor Abelardo Hernández Ortiz, Un hombre de 70 años que decidió ponerle fin a su vida en su lugar de residencia.
Una triste noticia
El pasado domingo, los familiares de don Abelardo hallaron al hombre suspendido de una viga. El hombre, luego de compartir con uno de sus nietos, ingresó a su habitación y allí después fue encontrado sin vida.
Abelardo Hernández residía en el popular barrio La Gaviota. Hacía un poco más de un año había padecido una trombosis, pero gracias a terapias y medicamentos logró recuperarse. El hombre de la tercera edad siempre trabajó como maestro de construcción y así se ganó la vida durante años.
Un hombre alegre
Don Abelardo, hacía dos años se había vinculado a la fundación La Nueva Esperanza. Allí se reunía cada 15 días con personas de su misma edad para pasar tardes amenas, hacer actividades físicas y recreativas. Según los directivos de la Fundación, Hernández se caracterizaba por ser un hombre alegre y participativo.
Carmen Chaves, directora de la Organización, relató que “en Diciembre hicimos unos árboles de navidad en paletas de helado, Abelardo participó y no solo fabricó su árbol, sino que creó varios para regalarle a sus nietos, él los quería mucho”.
Por otro lado, la señora Carmen afirmó que a todos los sorprendió la decisión fatal que tomó Abelardo, pues indicó que en la Fundación en varias oportunidades organizaron talleres para brindarles apoyo psicológico a los adultos mayores, por lo que no se esperaban que algo así sucediera.
